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13 feb (Reuters) – Los Rams de Los Ángeles se recuperaron en los últimos minutos para derrotar a los Bengals de Cincinnati 23-20 el domingo, dando un final de Hollywood a la Super Bowl y el primer campeonato a la franquicia desde que regresó a la Costa Oeste hace seis años.

Con la espalda contra la pared, el mariscal de campo o «quarterback» de los Rams, Matthew Stafford, mantuvo su aplomo para diseñar un drive muy largo que terminó con un pase de «touchdown» al MVP (jugador más valioso, por sus siglas en inglés) de la Super Bowl, Cooper Kupp, con 1:25 por jugar

El liniero defensivo de los Rams, Aaron Donald, atrapó al mariscal de campo de los Bengals, Joe Burrow, en la última jugada para sellar la victoria.

«Estoy muy feliz», dijo un emocionado Donald después del partido.

«He soñado con esto. Es una sensación increíble. Es surrealista», dijo, mientras llovía confeti sobre el veterano liniero y sus compañeros.

Unos Rams resistentes

Los Rams se vieron obligados a profundizar después de perder a su receptor estrella Odell Beckham Jr. por una lesión de rodilla en el segundo cuarto y caer por detrás 20-13 en el tercero.

La capacidad de sobreponerse a los contratiempos es lo que hace especial al equipo, dijo el entrenador en jefe Sean McVay a los periodistas.

«No tengo palabras para elogiar la resistencia de este equipo», dijo McVay.

«Los chicos dieron un paso adelante cuando tuvieron que hacerlo. Eso es lo que hace grande a este equipo. Por eso son campeones del mundo».

Con la victoria, los Rams se unieron a los Tampa Bay Buccaneers del año pasado como los únicos equipos en ganar un Super Bowl en su propio campo.

El único otro campeonato de Super Bowl de la franquicia se produjo hace 22 años, cuando tenían su sede en San Luis. La victoria también ayuda a compensar el dolor de haber quedado subcampeón ante New England hace tres años.

La acción se desarrolló ante un lleno total de más de 70.000 aficionados. La Super Bowl del año pasado en Tampa se limitó a 25.000 espectadores debido a la pandemia de COVID-19.

El partido también supuso la fiesta de presentación del nuevo estadio SoFi, de 5.500 millones de dólares, que está previsto que acoja grandes acontecimientos deportivos, como los partidos de la Copa del Mundo en 2026 y los Juegos Olímpicos en 2028.

La Super Bowl del próximo año se celebrará el 12 de febrero en el State Farm Stadium de Glendale (Arizona).