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A poco para el lanzamiento de su libro de memorias, titulado “The Woman in me”, Britney Spears se animó a contar las razones detrás de uno de sus momentos más polémicos: cuando se rapó la cabeza delante de los paparazzis y varios fanáticos, hace ya 16 años.

“Me habían observado mucho mientras crecía. Me miraban de arriba a abajo, la gente me decía lo que pensaban de mi cuerpo, desde que era adolescente. Afeitarme la cabeza y comportarme mal eran mis formas de contraatacar”, se le escucha contra en un adelanto a la revista People.

El 16 de febrero de 2007, en una concurrida avenida de Los Ángeles, con solo 25 años, Britney Spears era seguida por los paparazzis, mientras vivía uno de los momentos más difíciles de su vida: se había separado de Kevin Federline y mantenía una dura batalla legal por la custodia de sus hijos.

Además, tenía problemas con el alcohol y vivía el acoso de la prensa rosa estadounidense, quienes la seguían a todos lados.

EL POLÉMICO MOMENTO

Ese día entró en la peluquería, bajo la mirada de los fotógrafos y sus fanáticos, se acerco al espejo, tomó la afeitadora y rapó su cabeza a cero, sorprendiendo a todos.  Para ella, según cuenta de People, este acto fue como una liberación.

Sin embargo, y pese a que este momento podría haberse tomado como el inicio de un nuevo episodio en la vida de Spears, las cosas no mejoraron para ella: dos días después, las polémicas siguieron como cuando golpeó con un paraguas el vehículo de uno de los paparazzis que la seguían.