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La Contraloría General de la República va tras los pasos de los responsables de la infiltración de profesores y auxiliares con títulos falsos en el sistema educativo peruano. En diálogo con Latina Noticias, David Quiroga, gerente regional de Control del Callao, señaló que desde el 3 de julio la entidad viene revisando 3800 expedientes en los distritos de Ventanilla y Mi Perú.

En medio de esta investigación ya suman 36 los docentes que han renunciado a sus plazas de la Unidad de Gestión Educativa Local (UGEL) de Ventanilla. ¿Sus títulos serán examinados? ¿Sus nombres continuarán siendo objeto de verificación durante el proceso de auditoría que inicia la Contraloría?

Al respecto, Quiroga afirmó: «Ese docente ha ganado una plaza. Entonces, nosotros estamos yendo al proceso y a los ganadores de los procesos. Si usted renuncia, eso no menoscaba su responsabilidad al momento de la presentación de la documentación y también de la interna de la UGEL por no haberla verificado. El hecho está cometido».

EL CRUCE DE LA INFORMACIÓN

Actualmente, según el representante de la Contraloría, esta institución se encuentra recopilando información sobre los perfiles de los docentes. «Tenemos indicios de que habrían situaciones de carácter irregular. Y no solamente ello: ahora empezamos a pedir información a la Dirección Regional de Educación para ver el resto de colegios del distrito», adelantó.

Junto con la Fiscalía Anticorrupción, el organismo estatal cotejará los documentos con datos que puedan obtener de Superintendencia Nacional de Educación Superior Universitaria (Sunedu) y el Ministerio de Educación (Minedu). Además, han solicitado a los institutos educativos y tecnológicos que otorgan las certificaciones profesionales de los docentes.

David Quiroga manifestó que de hallarse más indicios de profesores «bambas», podrían replicarse indagaciones similares en «otras regiones». Sin embargo, consideró que el Minedu debería tomar cartas en el asunto. «Mucho ayudaría que la misma institución pueda realizar esa investigación de oficio que le corresponde, con información que tiene a la mano», indicó.

EL DESTAPE DE LOS PROFESORES «BAMBAS»

El pasado 2 de julio, la Unidad de Investigación de Latina Noticias y el programa dominical Punto Final revelaron que falsos docentes venían ejerciendo dicha profesión en seis colegios de Pachacútec, Ventanilla y Mi Perú. Así, se levantó la identidad de estas personas para determinar si los papeles entregados a las UGEL son verdaderos.

Dos de los casos que causaron asombro fueron los de Keisy Pamela Gonzáles Cajaleón y Nélida Paola Hilario Reyes. Ambas afirmaban tener título a nombre de la nación del Museo de Arte de Lima (MALI). Sin embargo, la entidad respondió que no reconocía «la veracidad de los documentos» que se presentaron con las identidades de dichas personas.

Asimismo, se verificó que muchos institutos en el que los presuntos docentes estudiaron Educación ya no existen. Incluso, quienes aseguraron contar con otros grados académicos —como una maestría— no figuraban en el registro de la Sunedu.

LA REACCIÓN DEL MINEDU

Tras la denuncia presentada por Punto Final, el Ministerio de Educación emitió un comunicado oficial en el que anunciaban la verificación de los títulos profesionales de los docentes a nivel nacional. En su mensaje, la entidad señaló que estos hechos «constituyen un delito flagrante que requiere la intervención de la Fiscalía».

Asimismo, el Minedu mencionó que se llevarán a cabo las investigaciones correspondientes para sancionar a aquellos que no cumplieron con los procedimientos de verificación. En caso de encontrar documentación falsa para ejercer, se procederá a su inmediata separación del cargo.