Por primera vez desde su regreso a la presidencia, Donald Trump se dirigió al Congreso de Estados Unidos asegurando que su administración, en 43 días, ha logrado más que otros gobiernos en años. Con su característico estilo, el mandatario defendió sus políticas sobre inmigración, economía y geopolítica, y no dudó en lanzar críticas a sus opositores.
Uno de los anuncios más sorprendentes de la noche fue su intención de que Estados Unidos recupere el control del Canal de Panamá. «No se lo dimos a China, se lo dimos a Panamá y lo vamos a recuperar», afirmó. Además, insistió en que el territorio es clave para la seguridad nacional y aseguró que su administración ya está trabajando en ello.
Otra de sus declaraciones más polémicas fue su renovado interés en Groenlandia. Trump aseguró que la isla autónoma de Dinamarca debería unirse a EE.UU. y que su gobierno hará lo necesario para conseguirlo. «Los haremos ricos y los mantendremos seguros», prometió el presidente, mientras destacaba la importancia estratégica y los recursos naturales del territorio.
En materia de seguridad, el mandatario redobló su postura contra el narcotráfico y declaró que es momento de que EE.UU. le «declare la guerra» a los carteles. Tras la reciente entrega de 29 capos mexicanos a la justicia estadounidense, Trump exigió que México y Canadá «hagan más» para frenar el tráfico de fentanilo.
El discurso también incluyó una fuerte ofensiva contra los derechos de las personas trans. Trump anunció que impulsará una ley para prohibir y criminalizar los cambios de sexo en menores, afirmando que «es una gran mentira» que los niños puedan estar en el cuerpo equivocado. Asimismo, reiteró su decisión de reconocer solo dos géneros en el país.
Respecto al conflicto en Ucrania, el presidente defendió su decisión de suspender temporalmente la ayuda militar a Kyiv y sugirió que algunos demócratas quieren prolongar la guerra. «¿Quieren que siga por otros cinco años?», preguntó irónicamente, mientras volvía a referirse a la senadora Elizabeth Warren como «Pocahontas».
En el ámbito económico, Trump anunció la creación del Departamento de Eficiencia Gubernamental, encabezado por el empresario Elon Musk. «Gracias, Elon. Está trabajando muy duro y él no necesitaba esto», expresó el mandatario, destacando su compromiso con la reducción del gasto público y la inflación.
Para cerrar, Trump prometió que su gobierno llevará a EE.UU. «a lo más alto», asegurando que el país está entrando en su «edad de oro». Con una visión optimista y desafiante, concluyó su discurso llamando a los estadounidenses a prepararse para «un futuro increíble».
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