La startup con sede en Tokio, Tsubame Industries, ha desarrollado un robot de cuatro ruedas de 4 metros de altura que se asemeja al «Mobile Suit Gundam», el icónico robot de la popular serie de animación japonesa.
Este robot, llamado ARCHAX, cuenta con monitores en la cabina que reciben imágenes de cámaras conectadas en su exterior. Esto permite al piloto maniobrar los brazos y las manos con palancas desde el interior del torso del robot.
El robot, de 3.5 toneladas, tiene dos modos: el modo «robot» en posición vertical y el modo «vehículo», en el cual puede viajar a velocidades de hasta 10 km por hora.
«Japón es muy bueno en animación, juegos, robots y automóviles, así que pensé que sería genial crear un producto que reuniera todos estos elementos en uno», dijo Ryo Yoshida, el CEO de 25 años.
Yoshida planea construir y vender cinco de estas máquinas para los entusiastas adinerados de los robots, pero también espera que algún día el robot pueda ser utilizado para labores de ayuda en desastres o en la industria espacial.
Desde una edad temprana, Yoshida se interesó por la manufactura, aprendiendo a soldar en la herrería de su abuelo y luego fundando una empresa que produce manos protésicas mioeléctricas. Él asegura que está ansioso por mantener viva la ventaja competitiva de Japón en la industria manufacturera.
«Espero aprender de las generaciones anteriores y continuar con la tradición», afirmó.
El robot ARCHAX es una impresionante hazaña de ingeniería que ha capturado la atención del público debido a su sorprendente parecido con los famosos robots «Gundam» de la serie de animación japonesa. Con una altura de 4.5 metros y cuatro ruedas, este robot no pasa desapercibido.
El joven emprendedor detrás de Tsubame Industries tuvo una visión clara para ARCHAX: quería crear un producto que capturara la esencia de la cultura japonesa, fusionando elementos de la animación, los juegos, los robots y la industria automotriz en un solo artefacto.
Aunque inicialmente se plantea como un producto para coleccionistas y entusiastas de los robots, Yoshida tiene planes más ambiciosos para ARCHAX. Él espera que el robot pueda ser utilizado en tareas de ayuda en desastres, donde su capacidad para sortear terrenos difíciles y transportar cargas pesadas podría ser invaluable.
Además, el potencial del robot en la industria espacial no pasa desapercibido. Su robusta estructura y capacidad de movilidad podrían hacer que ARCHAX sea una herramienta útil en futuras misiones espaciales y exploración de planetas.
Este robot, que parece haber salido directamente de una serie de animación, combina lo mejor de la tecnología y la cultura japonesa en un solo producto. Aunque su precio de 3 millones de dólares puede estar fuera del alcance de la mayoría, ARCHAX seguramente se convertirá en un símbolo de la innovación japonesa en los campos de la robótica y la tecnología.
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