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LIMA, 11 feb (Reuters) – La economía de Perú estaría por encima de los niveles previos a la pandemia por la recuperación de su demanda interna y récord en sus exportaciones, pese a una menor producción minera debido a constantes conflictos, dijo el viernes el Banco Central.

El gerente de estudios económicos del Banco Central, Adrián Armas, afirmó que la inflación en Perú, que registró el año pasado su tasa más alta en 13 años, comenzará a desacelerarse desde julio para ubicarse dentro del rango meta del banco de entre 1% y 3% anual en el cuarto trimestre del 2022.

«La economía se viene recuperando, se viene cerrando lo que se denomina la brecha del producto, pero todavía se ubicaría aún por debajo de su potencial», manifestó Armas. «Los indicadores adelantados de diciembre y enero nos muestran que la economía se ubicaría por encima nivel prepandemia», agregó.

El funcionario destacó la recuperación del sector de servicios -fuertemente afectado por la pandemia-, la producción de electricidad, el volumen de las exportaciones principalmente de productos agrarios y el crecimiento del empleo formal.

Armas señaló que las exportaciones de Perú, que alcanzarían los 63.106 millones de dólares el 2021 básicamente por mejores precios de minerales, representan un 28,1% del Producto Interior Bruto, «un récord histórico». «El entorno externo sigue siendo altamente favorable para la economía peruana», agregó.

Perú es el segundo mayor productor mundial de cobre. Minas importantes en el país vienen enfrentando conflictos con comunidades que, en algunos casos, han frenado producción.

Otra de razones de la recuperación de la economía es el dinamismo en la demanda interna por el avance de la vacunación con dosis completa contra el coronavirus, dijo Armas. Según el Gobierno, un 80% de la población objetivo ha sido vacunada.

«La gente comienza a salir con más confianza», añadió Armas en una conferencia telefónica sobre política monetaria del banco, que en la vispera subió por séptimo mes consecutivo la tasa de intéres a un 3,5% desde un 3,0%.

El funcionario sostuvo, sin embargo, que las expectativas empresariales sobre la economía local permanecen en el tramo pesimista, en medio de la incertidumbre política que vive el país con el gobierno del presidente izquierdista Pedro Castillo.

Armas dijo que en los balances de riesgo del banco se considera la posibilidad de un deterioro de la estabilidad política, pero «el banco, como ya lo ha hecho, tiene una alta capacidad de respuesta para enfrentar esa situación».