Con este intenso calor a quién no se le antoja un rico marciano de purita fruta, una refrescante gelatina o una deliciosa cremolada tricolor. Mientras disfruta de estos manjares veraniegos, ¿se ha puesto a pensar en qué condiciones son elaborados?
Si bien en la gran mayoría de los casos desconocemos cómo los vendedores se abastecen de sus productos, cómo los preparan y envasan, muchos aseguran que son ellos mismos los que elaboran los marcianos y cremoladas con higiene y garantía. Sin embargo, otros, los compran a terceros y no están muy seguros cuáles son las condiciones de elaboración.
“El producto está embazado en la una bolsa plástica que no se sabe si está limpia. Tiene partículas al interior que no podemos determinar si son propias de la maracuyá. Es más cuando uno comienza a consumir este producto lo usual es que chupe la bolsa plástica y eso también lo mantiene en peligro de contaminación”, explicó Antonio Castillo, representante del Instituto Nacional de Salud.
Según el especialista, el alimento está expuesto y tiene una carga bacteriana sí o sí. A mayor carga bacteriana el daño es aún peor o hasta irreversible. Infecciones intestinales por ecoli, estafilococos y estreptococo, que pueden incluso desencadenar la muerte.
Latina Noticias realizó un experimento con una gelatina adquirida en las calles de Lima y será sometida a un análisis microbiológico para conocer si está o no expuesto a bacterias.
En una semana los resultados del cultivo practicado a este producto arrojaran la carga bacteriana que posee.
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