A pesar de que las calles ya fueron limpiadas los lugareños siguen apenados por el accionar de los jóvenes.
Un grupo de estudiantes del Liceo Francisco Alberto Camallo Deño, celebraron el fin de clases destruyendo libros y lanzando sus carpetas, lo cual causó una gran indignación en los lugareños.
Cientos de hojas de los cuadernos tiradas en las calles revelaban la mala decisión de los menores, que decidieron iniciar con una mala acción sus vacaciones.
A pesar de que las calles ya fueron limpiadas, los lugareños se sienten indignados y decepcionados.
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