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CIUDAD DE MÉXICO, 24 ene (Reuters) – Una periodista mexicana, quien hace tres años había pedido al presidente protección porque temía por su vida, murió tras ser baleada, en el segundo ataque contra comunicadores en una semana en la misma región del norte de la nación, considerada una de las más peligrosas del mundo para ejercer el periodismo.

Lourdes Maldonado, considerada una decana del periodismo en Tijuana, en la frontera con Estados Unidos, fue atacada la noche del domingo cuando se encontraba dentro de su vehículo a las afueras de su vivienda, dijo la fiscalía del estado Baja California en un comunicado.

Ella es la tercera periodista asesinada en México en lo que va de 2022, de acuerdo con la organización internacional de protección a la prensa Artículo 19, que condenó los hechos y que tiene el registro del homicidio de 27 comunicadores durante el actual sexenio.

En 2019, la reputada comunicadora de radio y televisión asistió a una de las habituales conferencias de prensa del presidente Andrés Manuel López Obrador, en Ciudad de México, para pedir ayuda, pues aseguró que temía por su integridad.

Hace apenas unos días, según medios mexicanos, Maldonado ganó una añeja demanda laboral por despido injustificado contra un empresa de medios del exgobernador de Baja California, Jaime Bonilla, cercano a López Obrador.

El mandatario dijo el lunes en su conferencia de prensa, cuando fue consultado sobre el suceso, que era «muy lamentable» lo ocurrido. El presidente ha recibido duras críticas de varios sectores por la falta de protección para comunicadores durante su gestión.

«Se está haciendo la investigación, no se puede en automático vincular a una demanda laboral a un crimen, no es responsable adelantar ningún juicio», agregó el presidente, quien también ha sido cuestionado por algunas declaraciones vistas como poco sensibles referidas a los ataques contra periodistas.

El crimen de Maldonado se produjo a menos de una semana de que las autoridades informaran que el fotoperiodista Margarito Martínez murió tras recibir un disparo en la cabeza frente a su casa, también en Tijuana.