Las peligrosas operaciones que costaban entre 800 y 2 mil soles se ofrecían a través de Facebook.
La Policía detuvo a José Luis Subauste Romero y su cómplice Walter Mendoza Picoga por realizar prácticas abortivas de manera ilegal en un mini laboratorio en Jesús María.
En el pequeño departamento que funcionaba como consultorio clandestino de prácticas abortivas hallaron, instrumentos en pésimas condiciones, camillas ginecológicas y hasta mesa de curaciones.
Subaste Romero, quien no concluyó sus estudios de medicina, ya había estado preso en el 2004 por Ejercicio Ilegal de la Medicina y Asociación Ilícita para delinquir.
Por otro lado, Mendoza Picoga sería quien hacía los enlaces con quienes querían abortar, cuyo costo era entre 800 y 2 mil soles. El servicio era ofrecido vía Facebook, asegurando que se daba solución inmediata al embarazo.
Te puede interesar:
También te puede interesar