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BRASILIA, 6 abr (Reuters) – El presidente Luiz Inácio Lula da Silva anunciará el lunes el regreso formal de Brasil a la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), con una cumbre de los líderes de la región que se celebrará en Brasilia, posiblemente a finales de mayo, dijeron a Reuters fuentes cercanas al asunto.

La reanudación de la Unasur es una de las propuestas de campaña de Lula, que siempre ha defendido la alianza política de los países de la región.

El bloque, creado en 2004 como Comunidad Sudamericana de Naciones y transformado en Unasur en 2008, fue abandonado formalmente por Brasil en 2019 por decreto durante el Gobierno de Jair Bolsonaro, que lo consideraba un club de países de izquierda.

Sin haber pasado la decisión por el Congreso, como sería regular -la adhesión fue aprobada por los parlamentarios en 2011-, el regreso de Brasil al bloque, internamente, es simple, con solo la anulación del decreto de Bolsonaro.

Varios países de la región, en su mayoría entonces en manos de presidentes de derecha, también han abandonado el bloque: Argentina, Chile, Colombia, Uruguay y Paraguay. El entonces mandatario de Chile Sebastian Piñera intentó organizar la región en otro bloque, Prosur, que excluía a Venezuela, pero la iniciativa no prosperó.

El regreso de Brasil a Unasur

Según fuentes consultadas por Reuters, Brasil iniciará los trámites burocráticos para reincorporarse formalmente a la organización y está en contacto con los demás países para que también regresen.

Aún no se ha fijado la reunión de Brasilia ni se han cursado invitaciones a los 12 países, pero se están realizando consultas para celebrar un encuentro a finales de mayo, después de que Lula regrese de Japón, donde participará en la cumbre del G7 del 19 al 21 de mayo.

La cumbre se denomina reunión de jefes de Estado, y no de Unasur, porque es probable que no todos los países hayan completado su regreso al bloque para esa fecha. Sin embargo, la intención es precisamente discutir los objetivos y el formato de la nueva Unasur a partir de ahora.

El bloque llegó a tener una sede física en Quito -ahora desactivada- y una estructura que incluía una escuela sudamericana de defensa, un centro de estudios estratégicos y un instituto de salud.

El bloque basaba su cooperación principalmente en las áreas de salud e infraestructura, pero ahora el presidente brasileño pretende incluir acciones frente el cambio climático en el corazón de las acciones de Unasur.

(Reporte de Lisandra Paraguassu. Editado en español por Juana Casas)