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Ante la inminente llegada del fenómeno El Niño, el Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego (Midagri) ha implementado ajustes en el Seguro Agrícola Catastrófico (SAC) con el fin de brindar un apoyo más directo a los productores frente a futuros desastres naturales. El SAC es un seguro gratuito, financiado al 100% por el Estado, que busca proteger a los agricultores más pobres y vulnerables de los 24 departamentos del Perú.

La modificación mencionada en este seguro para la campaña 2022-2023 se dará durante agosto y permitirá el incremento de la indemnización de 800 soles por hectárea. La ministra de Desarrollo Agrario y Riego, Nelly Paredes, adelantó que, «para la próxima campaña agrícola, vamos a tener un nuevo Seguro Agrícola que tomará en cuenta los posibles efectos del Fenómeno El Niño, como son intensas lluvias en el norte y sequías en el sur; contrataremos un nuevo seguro que tendrá ajustes para hacerlo más beneficioso para los pequeños productores del campo».

Entre otros, se destinarán 575 millones de soles a la limpieza de los ríos y quebradas en los sectores que sufran los efectos de intensas lluvias, como Áncash, La Libertad, Lambayeque, Piura e Ica. Otra medida que se pondrá en marcha es la instalación de barreras o geomallas de protección en zonas de alta vulnerabilidad, como Lima e Ica, lo que contribuirá a la defensa de las poblaciones en caso de presentarse intensas lluvias e incremento del volumen de ríos debido al evento climático.

¿CÓMO ACCEDER A LOS 800 SOLES EN CASO DE DESASTRE?

Si se produce un incidente, el agricultor debe notificar a la agencia u oficina agraria correspondiente, ya sea mediante una visita en persona o a través de una llamada telefónica. La agencia agraria, a través de la Dirección Regional de Agricultura (DRA), comunica el incidente a la compañía de seguros mediante un correo electrónico, dentro de un plazo máximo de siete días desde que tuvo lugar el evento.

La compañía aseguradora designa a un experto ajustador que se encarga de inspeccionar los daños sufridos en los cultivos asegurados en un plazo de 15 días a partir de la notificación del siniestro. Durante la evaluación de los daños, el ajustador trabaja en colaboración con un representante agrícola y elabora un informe detallado, conocido como acta de ajuste. 

En caso de que el informe refleje una pérdida catastrófica, la compañía de seguros coordina con la Dirección Regional de Agricultura (DRA) el registro de los agricultores afectados en los 30 días posteriores.

Al finalizar el proceso, la compañía de seguros procede a abrir cuentas bancarias y efectúa el pago de las compensaciones correspondientes a los agricultores. Cada hectárea asegurada del cultivo recibirá la suma acordada dentro de un plazo máximo de 30 días.