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Un delincuente llegó a los exteriores de una conocida discoteca en Trujillo y, sin importar la presencia de personas a su alrededor, denotó un explosivo que dejó 3 heridos (dos miembros del personal de seguridad y una comerciante que vende a pocos metros del lugar). Se trataría de un acto de venganza. 

Este ataque, captado por las cámaras de seguridad, ocurrió alrededor de las 4:10 de la madrugada. En las imágenes se observa que un sujeto llega al frontis de la discoteca Maroma, ubicada en la avenida Túpac Amaru de Trujillo, y rápidamente se aproxima a la entrada del local donde se encontraba el personal de seguridad. Allí, sin dudarlo, ocasiona la explosión. 

“¿Cómo se da este hecho? Cuatro personas estaban discutiendo en el interior del local. Al percatarse de eso, personal de seguridad los invita a salir. Entonces, uno de estos sujetos sale del lugar lanzando palabras soeces y advirtiendo que iba a regresar a cobrar venganza”, cuenta el alférez Joel Gonzáles de la Divincri Trujillo. 

“(Treinta minutos después) regresa no este sujeto, sino ya por información, es que esta persona manda a una persona de nacionalidad venezolana con una bolsa. Esta persona llega a la puerta de la discoteca, lanza la bolsa y es ahí donde detona un explosivo”, añade el policía. 

No hubo muertes

Productos del estallido, dos miembros de seguridad y una comerciante resultaron heridos. La Policía Nacional del Perú (PNP) confirmó que los tres se encuentran estables y descartó que el ataque esté relacionado con un tema de extorsión, pues habría sido un acto de venganza.