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La devastadora tragedia ocurrida en Marruecos, donde un terremoto de magnitud 6.8 dejó más de 2,000 muertos y miles de heridos, nos recuerda la importancia de estar preparados para enfrentar un posible terremoto en Lima. Esta advertencia es especialmente relevante considerando que Lima ha mantenido un «silencio sísmico» durante 277 años, lo que significa que nuestra ciudad no ha experimentado un gran terremoto durante este período.

El terremoto en Marruecos, con su epicentro en Marrakech, una ciudad que había permanecido en silencio sísmico durante 123 años, nos muestra lo devastador que puede ser un evento de esta magnitud. Para poner esto en perspectiva, Lima, la capital peruana, se encuentra en una zona donde se ha acumulado una gran cantidad de energía sísmica que solo se liberará con un terremoto de magnitud 8.8, según el Instituto Geofísico del Perú (IGP).

QUÉ ES EL SILENCIO SÍSMICO

El término «silencio sísmico» o «laguna sísmica» se refiere a una región donde no ha habido terremotos significativos durante un largo período de tiempo, en contraste con áreas circundantes que sí han experimentado actividad sísmica.

El caso de Lima, la capital peruana, es particularmente inquietante. Según el IGP, Lima es una de las áreas más vulnerables debido a la acumulación de energía sísmica a lo largo de más de 277 años. La energía liberada por la fricción de las placas tectónicas ha estado acumulándose durante más de 100 mil días bajo nuestros pies, lo que hace que estemos en alto riesgo de experimentar un sismo de magnitud significativa.

Este período de «silencio sísmico» en Lima significa que la energía acumulada en la zona es inmensa y podría liberarse en un terremoto de magnitud 8.8, según las estimaciones del IGP. El último gran terremoto de magnitud 8.8 en Lima ocurrió en 1746, lo que indica que la ciudad ha estado en un estado de vulnerabilidad sísmica durante casi tres siglos. En comparación, en Chile, otro país con alta actividad sísmica, el terremoto de magnitud 8.8 que ocurrió en 1835 se repitió en 2010.

En la costa peruana, las placas de Nazca y Sudamericana colisionan frontalmente, permitiendo que la primera se introduzca por debajo de la segunda. Esto ocasiona el proceso conocido como subducción que genera una deformación llamada aspereza. La más crítica se encuentra frente a la costa central del Perú, incluyendo Lima, y se espera que produzca un sismo de magnitud 8.8.

MEDIDAS DE PREVENCIÓN

La amenaza de un terremoto de gran magnitud en Lima es real, y es esencial que todos estemos preparados para enfrentar esta eventualidad. Aquí hay algunas medidas preventivas clave que debes tener en cuenta:

Identifica Zonas Seguras: Asegúrate de conocer las áreas seguras dentro de tu hogar y lugar de trabajo. Estas áreas deben ser accesibles, iluminadas y sin obstáculos. Practica regularmente con tu familia dónde refugiarse durante un sismo.

Practica el Protocolo «Agacharse, Cubrirse y Sujetarse»: Durante un sismo, agáchate para reducir el riesgo de caídas, cúbrete la cabeza y el cuello para protegerte de objetos que puedan caer, y sujétate a algo sólido como una mesa resistente.

Mochila de Emergencia: Prepara mochilas de emergencia para cada miembro de la familia. Incluye elementos esenciales como agua, alimentos no perecibles, medicamentos, linternas, pilas, ropa abrigada y documentos importantes.

Condiciones del Hogar: Asegura los objetos pesados en tu hogar, como muebles y electrodomésticos, para evitar que se vuelquen durante un sismo.

Plan Familiar de Emergencia: Desarrolla un plan de emergencia con tu familia. Define puntos de encuentro y cómo comunicarse en caso de separación durante un desastre.

LA MOCHILA DE EMERGENCIA

Una mochila de emergencia, también conocida como mochila de supervivencia o mochila de 72 horas, es un kit que contiene suministros esenciales para sobrevivir durante un período de tiempo limitado en caso de una emergencia. Está diseñada para ser portátil y fácil de transportar, lo que la convierte en un recurso invaluable en situaciones de sismo u otros desastres naturales.

Ahora que comprendes la importancia de la mochila de emergencia, aquí hay una lista de elementos esenciales que debes considerar incluir:

Agua: Al menos tres litros de agua por persona para un período de tres días. Puedes optar por botellas pequeñas o bolsas de agua empaquetadas para ahorrar espacio.

Alimentos no perecederos: Alimentos enlatados, barras de granola, alimentos envasados al vacío y alimentos enlatados son buenas opciones. Asegúrate de tener suficiente comida para al menos tres días.

Botiquín de primeros auxilios: Incluye vendajes, antisépticos, medicamentos recetados y cualquier artículo médico específico que necesites. Asegúrate de que esté actualizado.

Linterna y pilas: Una linterna con pilas de repuesto es esencial para la iluminación en situaciones de poca luz.

Manta de emergencia: Una manta térmica puede ayudarte a mantenerte abrigado en condiciones adversas.

Herramientas multiusos: Una navaja suiza u otra herramienta multiusos puede ser invaluable en situaciones de supervivencia.

Documentación importante: Copias de documentos personales, como pasaportes, identificaciones y papeles legales, almacenados en una bolsa impermeable.

Ropa y calzado adicionales: Ropa adecuada para el clima y calzado cómodo. Considera las necesidades específicas de tu familia, como ropa para bebés o niños pequeños.

Artículos de higiene personal: Toallitas húmedas, papel higiénico, desinfectante de manos y otros artículos de higiene.

Dinero en efectivo: En situaciones de emergencia, puede que no tengas acceso a cajeros automáticos o pagos electrónicos.

Herramientas de comunicación: Un teléfono móvil con cargador, una radio a pilas y una lista de contactos de emergencia.

Artículos para niños y mascotas: Si tienes niños pequeños o mascotas, considera sus necesidades específicas, como pañales, leche en polvo o comida para mascotas.