El partido entre Brasil y Argentina se jugará en el mítico estadio Maracaná, con un aforo permitido del 10%
La final de la Copa América, que enfrentará este sábado a las selecciones de Brasil y Argentina, podrá recibir hasta el 10% de la capacidad de público del estadio Maracaná, informó el municipio de Río de Janeiro. El público autorizado a estar presente en el estadio estará formado únicamente por acreditados e invitados de la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) y deberán presentar una prueba PCR negativa para el Covid-19.
Según el alcalde de Río de Janeiro, Eduardo Paes, la final de la Copa América será una especie de «prueba» para la ciudad. «No deja de ser un evento de prueba para nosotros. Lo observaremos y tenemos un decreto para liberar eventos a partir de una serie de requisitos, pero por ahora no cambia nada para otros eventos», dijo el alcalde en una rueda de prensa.
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