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La Selección peruana realizó este viernes su primer entrenamiento en Austria con miras al amistoso del domingo ante Arabia Saudita, con la participación de su capitán Paolo Guerrero.

Bajo las órdenes de Ricardo Gareca, el entrenamiento de la ‘Blanquirroja’ se llevó a cabo en la localidad de Schurns, en los Alpes austriacos e incluyó un partido de práctica.

Guerrero participó en los entrenamientos tras ser habilitado por una decisión del Tribunal Federal de Suiza para participar en el Mundial Rusia 2018. 

 

¿Qué gana la selección peruana con la vuelta de su capitán?

 

Lo primero que se puede resaltar es que la selección volverá a tener un líder natural que se ponga el equipo al hombro cuando más lo necesita. Eso lo demostró Paolo Guerrero en los partidos cruciales cuando el resultado siempre fue adverso.

 

 

En definitiva, Paolo le aporta goles a la Blanquirroja. En la actualidad es el máximo goleador histórico de la escuadra nacional, con 33 tantos. En las dos últimas ediciones de la Copa América que disputó -2011 (5 tantos), 2015 (4)- se consolidó como artillero.

Otro de los factores importantes es que su sola presencia genera preocupación en los rivales. Su experiencia le permite enfrentar con facilidad a defensas de gran estado físico como serán los de Dinamarca, Francia y Australia, rivales de Perú en Rusia 2018.

Más allá del liderazgo que pone de manifiesto en la Bicolor, Guerrero es un jugador complicado de detener, porque sabe jugar muy bien de espaldas y se desmarca gracias a su potencia.

Dentro del área es letal ya que resuelve muy bien las situaciones que le generan Miguel Trauco y Yoshimar Yotún, quienes son los mejores lanzadores.