El pasado miércoles 1 de noviembre, decenas de mujeres de las ollas comunes de Villa María del Triunfo, de Villa El Salvador, Rímac y Chorrillos protestaron en la puerta de Latina Televisión. Algunas de ellas portaban cárteles con frases alusivas a favor de la gestión municipal de Lima, que desde agosto administra con recursos propios el reparto de productos para la alimentación de miles de familias en situación de pobreza. Pero, ¿cuál es la verdadera motivación de estas personas y quién o quiénes están detrás de esta convocatoria?
Las imágenes que lograron captar las cámaras de seguridad de Latina, lo que en ocasiones pasa imperceptible ante los ojos del ser humano, suele quedar registrado ante el lente de una cámara. Quizás lo captado pueda dar luces de que no todo es lo que parece. A continuación, trabajadores y funcionarios de la municipalidad de Lima, en medio de una marcha supuestamente auto-convocada por representantes de las ollas comunes.
El último domingo, Punto Final presentó un reportaje donde expuso una problemática social muy preocupante. En plena recesión económica, en un momento en el que el Perú encabeza la lista de países con inseguridad alimentaria, es decir, donde cada vez son más los peruanos que no comen 3 veces al día y donde los índices de pobreza y desnutrición infantil continúan creciendo, recogimos el reclamo de algunos representantes de las ollas comunes
En el reportaje, algunos beneficiarios de las ollas comunes manifestaron que desde que la municipalidad de Lima se encarga del reparto de productos, estos no alcanzan hasta fin de mes, porque reciben menos cantidad, por ejemplo: el arroz.
Esto generó la reacción inmediata de la Municipalidad de Lima, que convocó a una conferencia de prensa para el martes 31 de octubre. Efectivamente, ese día, en el palacio municipal, al lado del alcalde y de la gerente de desarrollo social, Isabel Ayala, estuvieron dos representantes de las ollas comunes. Ante los periodistas de distintos medios de comunicación, admitieron lo que habíamos expuesto en el reportaje.
A través de WhatsApp, las ollas comunes recibían mensajes para “participar en una marcha hacia este canal el día 1 de noviembre. Se anunciaba que habría movilidad ida y vuelta y pedían 3 mamitas por olla común”.
El miércoles, a las 10 de la mañana, decenas de mujeres se presentaron en el ingreso principal de Latina Televisión en Jesús María. La protesta fue liderada por Luz Solórzano, la representante de la olla común de Villa María del Triunfo, quien pedía lo siguiente: “Venimos a reclamar que se retracten, es cierto quizá recibimos menos productos, pero es porque el MIDIS lo dispone, estamos agradecidas con el alcalde».
Luz Solórzano es bastante conocida en esta gestión de la Municipalidad de Lima, pues ha sido condecorada en varias ocasiones y viajó a Argentina junto a funcionarios de esta entidad edil. Además, ha estado ligada a campañas políticas, participó incluso en la de Daniel Urresti cuando éste postuló a la alcaldía de Lima. Hoy, se muestra a favor de quién le ganó las elecciones a su entonces candidato.
Esta mujer también es conocida por Latina Noticias, pues fue quien nos recibió amablemente cuando llegamos con donaciones para su olla común hace tres años.
Solórzano llegó junto a mujeres que traían consigo carteles de aprobación y agradecimiento a la gestión edil. Pero, ¿qué reclaman exactamente estas mujeres que pertenecen a distintas ollas comunes de Lima? Estas personas beneficiarias de este programa social en algunos casos apenas juntan dos soles diarios para comer una vez al día; sin embargo, llegaron en 7 buses, cuyo alquiler puede llegar a costar de 300 a 400 soles por unidad. Estamos hablando de una inversión de más de 2800 soles.
«Hemos juntado dos soles por persona para juntar los 300 soles que cuestan, nadie nos ha financiado», dice Solórzano. Asimismo, algunas de las integrantes de esta marcha, parecían un poco desorientadas e incluso creían que venían a sumarse al reclamo que precisamente difundió Punto Final mostrando que reciben menos alimentos.
Dentro de este grupo de señoras, empezamos a detectar a trabajadores de la municipalidad de Lima. La primera identificada fue esta joven que graba y entrevista a las manifestantes. Se trata de Fiorella Novoa Marín, tiene 31 años y es encargada de realizar videos para las redes sociales de la comuna limeña.
El segundo en ser identificado fue Beckin Cajas, quien cumplía el mismo rol que su compañera en medio de la protesta. Trabaja en el área de prensa y comunicaciones de la municipalidad de Lima. Al ser abordado, sólo atinó a subir a su vehículo.
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