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El cocinero peruano Charles Thompson, quien trabaja en Estados Unidos, fue convocado por un grupo de ayuda para viajar a Israel y cocinar para los afectados por la guerra.

Intentando contener el llanto, Thompson reconoce que es muy triste la situación que se vive en Israel. “Buenas noches a todos los peruanos. Me invitaron a ser parte de un grupo de ayuda y fue muy difícil la decisión para llegar hasta acá, es muy triste lo que está pasando, desgarrador para cualquier humano, es difícil estar aquí y ser indiferente al dolor ajeno”, dijo con la voz entrecortada en comunicación con Latina Noticias.

PELÍCULA DE TERROR

“Me es difícil comunicarme contigo, es muy doloroso, es como estar en una película de terror. En las noches me da ataque de pánico, no sé si habrá un mañana, pero ya al estar acá no queda más que seguir adelante”, añadió.

En ese sentido, el peruano confesó que su mayor deseo es que la situación de terror pare, pues a diario está muriendo mucha gente. “Mi labor es cocinar, para aportar en lo que se pueda y en lo que sé hacer, nací para cocinar y eso hacemos. Ahora estamos resguardados, estamos a 60 kilómetros de Gaza. Esperemos que esto no continúe. Alrededor del mundo, todos quieren que esto pare. Se vive una incertidumbre de miedo”, contó.

“Yo cuando tenía que tomar la decisión de venir, me costó mucho, pero ya cuando estás aquí, las ganas de ayudar y de querer seguir ayudando te da muchas fuerzas. Si a mí se me ven las lágrimas es porque está muriendo mucha gente y como humano no puedo ser indiferente al dolor ajeno, es muy doloroso”, acotó.