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La ciudad de Pamplona, en España, dio inicio su festividad más esperada: las fiestas de San Fermín. El evento comenzó este jueves 6 de julio y tuvo como una de sus principales actividades el encierro, el momento en que miles de personas corren para no ser embestidas por los toros. 

La primera fecha de esta tradicional carrera convocó a miles de turistas, tanto locales como de distintas partes del mundo. Y a diferencia de años anteriores, esta vez no hubo víctimas que lamentar. Solo hubo algarabía y adrenalina durante, al menos, los cuatro minutos que duró la corrida. 

“Me gusta todo. Pamplona no defrauda”, dijo una de las asistentes. “Recién vamos a empezar a disfrutar, pero, por lo que estamos viendo, todo será un espectáculo”, agregó, por su parte, otro turista. 

La celebración arrancó oficialmente con un multitudinario chupinazo (el lanzamiento de un cohete que indica el comienzo de una fiesta), el cual se realizó frente al ayuntamiento de Pamplona.

UNA SEMANA DE FIESTAS

Miles de personas estuvieron presentes vestidas de rojo y blanco, los colores tradicionales de esta festividad, la cual es un homenaje en honor a San Fermín de Amiens, un misionero cristiano cuyo valor religioso es muy venerado en la ciudad de Pamplona.

Los Sanfermines durarán una semana con fiestas por doquier y con la participación de casi un millón de turistas en una localidad donde habitan casi 250 mil personas. El día final será el 14 de julio en que se despedirá la fiesta con el popular canto ‘Pobre de mí’, que marca el cierre de una festividad considerada patrimonio cultural y material de la inmunidad, y que, sin duda, este año dejará gratas postales.