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Cifras de terror. En los últimos cuatro meses se ha registrado un promedio de entre ocho a diez secuestros en la capital. Los delincuentes ahora tienen en la mira a los emprendedores.

Fueron sus últimas palabras cuando pedía desesperadamente a su familia para que pague por su liberación. Con un letrero sobre el cuello “paguen si no se muere” sus captores amenazaban. Sin pensar que días después cumplirían con su cometido, asesinando al dentista Christian Quispe Culqui.

En efecto, así como este odontólogo, son varios empresarios y también pequeños emprendedores, los que vienen siendo víctimas de una ola de secuestros cada vez más elevada en Lima.

Estas imágenes son del preciso instante del secuestro del propietario del night club Molino Rojo en San Juan de Lurigancho. Momentos de terror cuando sus captores llegaron armados para luego interceptarlo a la salida de su local, llevarlo hasta un vehículo y mantenerlo secuestrado por toda una semana.

Este es el video que sus captores le hicieron grabar para enviarlo a sus familiares. Le exigían medio millón de soles. Se trata de Oscar Paiva, quien por suerte fue liberado sano y salvo, luego de que sus familiares pagaran una fuerte suma de dinero.

Sin duda uno de los más sonados fue la del empresario químico José Silva Camargo, secuestrado en diciembre de 2022. Tras permanecer 58 días en manos de sus captores, escapó de su cautiverio el pasado 5 febrero.

Asimismo, de acuerdo con la PNP, ya no se tratarían de secuestros al paso, pues estos criminales exigen montos superiores a los 100 y 500 mil soles por liberar a sus víctimas. Tampoco discriminan en edad, ni en profesión, ni el ámbito laboral.