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La muerte de Richard Hidalgo ha conmocionado al mundo del alpinismo. El montañista peruano falleció entre las cumbres del Himalaya, su eterna pasión y destino final. El cuerpo de hidalgo fue hallado sin vida en su tienda  de campamento en el monte Makalu, ubicada 8.481 metros.

 

Sin embargo, ¿qué habría ocasionado la muerte de este destacado alpinista con 25 años de experiencia? Según los especialistas se trataría del mal de montaña o mal de altura, conocido popularmente como soroche.

 

“Ha provocado una falla  en los mecanismos de  adaptación que el ser humano tiene cuando asciende a las alturas y produjo una disfunción de tres órganos importantes como el corazón, pulmón y cerebro.  Entrando las vísceras y órganos del cuerpo en isquemia provocando un gran infarto”, explicó el Dr. Almieri.

 

Es que al nivel del mar el ser humano tiene 100 % de oxígeno y en cambio si uno asciende a más de 5000 mil el oxígeno se reduce en 50 % y a 7 mil m s. n. m.  se le conoce como la zona de la muerte, el oxígeno apenas llega a la tercera parte. Hidalgo acampaba a 6.600 metros.

 

Un factor que habría sido clave es que durante la madrugada la temperatura en la  montaña desciende  -20° provocando una vaso construcción: es decir las obstrucción de las arterias cerrando las vías hasta en un 50% circulando menos flujo sanguíneos y oxígeno a los órganos.

 

“Ha generado el edema cerebral, pérdida de consciencia  y juicio,  y esto puede haber  pasado mientras estaba durmiendo, un edema pulmonar,  isquemia cardíaca y edema cerebral”, explica el médico especialista.

 

Una vez superado los 7 mil metros los alpinistas deben utilizar un balón de oxígeno incluso mientras duermen, hasta los sherpas, pobladores de las regiones montañosas deben recurrir a este sistema.

 

 

En Perú ascendía a montañas de 5 mil metros y se quedaba 2 o 3 semanas con el propósito de aumentar la cantidad de hemoglobina, lo que le permite capturar mayor oxígeno del medio ambiente. Él ha estado buscando activar un mecanismo de adaptación.

 

Su edad habría sido otro de los factores, a sus 52 años hidalgo había retado fatalmente a la naturaleza y a su cuerpo para llegar a la cima del Makalú.