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El jefe de la Dirección Nacional de Inteligencia (DINI), José Fernández Latorre, optó por entregarse al Ministerio Público, luego de que se dictara una orden de diez días de detención preliminar. Esto en el marco de las investigaciones por el caso Petroperú.

Al igual que con Fernández, la medida comprende a Henry Shimabukuro y Samir Abudayeh, ambos capturados este viernes 25 de noviembre. En tanto, Hugo Chávez Arévalo, exgerente de Petroperú, se encuentra como no habido.

Además de las capturas, la Fiscalía y la Policía Nacional condujo allanamientos de 11 domicilios vinculados a los cuatro investigados. Los delitos que se le imputan son contra la administración pública, tráfico de influencias y otros en agravio del Estado peruano.

De acuerdo a la tesis del Equipo Especial de Fiscales contra la Corrupción del Poder, Fernández habría entregado dinero al exsecretario de Palacio de Gobierno, Bruno Pacheco, para comprar su silencio respecto a las licitaciones irregulares en Petroperú.

Estas tuvieron como principal beneficiada a la empresa Heaven Petroleum Operators (HPO), propiedad de Samir Abudayeh, con un contrato de 74 millones de dólares para la provisión de biodiesel B100. Tanto Abudayeh como Fernández mantuvieron reuniones con el presidente Pedro Castillo.

JOSÉ FERNÁNDEZ Y SU IMPLICANCIA EN EL CASO

Los cuatro investigados formarían parte de la organización criminal que presuntamente lidera el mandatario. José Fernández Latorre habría entregado hasta 4.000 soles a Henry Shimabukuro, para que dicho monto se le proporcione a Pacheco Castillo.

Según la Fiscalía, en una de las reuniones que mantuvo con el presidente, a Fernández Latorre, a Shimabukuro y a Beder Camacho se les asignó la tarea de desaparecer evidencias que vincularían al jefe de Estado con los investigados por el caso Petroperú.