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Está previsto que hoy empiece la ejecución de las obras de encauzamiento en las quebradas San Idelfonso y San Carlos en Trujillo con la participación del presidente de la República, Pedro Castillo; sin embargo, esto se da tras las recientes protestas de un grupo de agricultores que se oponen al proyecto.

Este proyecto que se realiza en alianza con la empresa Besalco Stracon tiene como objetivo proteger a más de 650 000 personas de posibles inundaciones generadas por el aumento del caudal de las quebradas, tal y como sucedió en 2017 con el Fenómeno El Niño Costero que causó decenas de damnificados por los desbordes, inundaciones y huaicos. 

“Estamos emocionados de que estas obras inicien; es una construcción esperada por la población de La Libertad. El pedido del presidente Pedro Castillo es proteger a la población de cualquier desastre natural que se pueda presentar”, destacó el director ejecutivo de la Autoridad para la Reconstrucción con Cambios, Robert Lopez.

Por más que han asegurado que estas obras generarán de manera directa e indirecta puestos de trabajo que contribuirán con la reactivación económica de la región, los agricultores se sienten excluidos porque hasta el momento sus preocupaciones no han sido resueltas.

¿Cuál es el temor de los agricultores?

Los agricultores de Laredo, por ejemplo, protestaron el 20 de julio en la plaza de armas de Trujillo contra la ejecución de estas obras, porque temen que durante los trabajos sus tierras sean expropiadas y así les quiten el sustento económico para sobrevivir. 

“Ya han ido a amenazar. El río Moche ha tenido su ancho natural de 20 a 25 metros, pero como hicieron el enrocado prácticamente se emparejó el río, se colmató, entonces cuando viene el agua se desplaya en ambas márgenes, entonces ahora está con 80 metros […] y los dejan sin terreno a ellos habiendo una faja marginal”, dijo en esa ocasión el representante de los agricultores de Laredo, Jorge de la Cruz. 

La propuesta de los agricultores es descolmatar y reforestar los cauces de San Idelfonso, San Carlos y del río Moche para evitar inundaciones de más de cinco mil hectáreas. Aseguran que su proyecto costaría la quinta parte de la obra de reconstrucción.