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En el sótano de un exclusivo hotel en Miraflores, fueron hallados dos lujosos vehículos: un Porsche Cayenne Turbo Hatchback y un convertible Volvo, ambos aparentemente escondidos para evitar que sean intervenidos por las autoridades.

Estas imágenes difundidas por Punto Final, fueron capturadas por un drone que detalló la ubicación precisa y el estado de los vehículos, lo que destapó una posible maniobra de ocultamiento de bienes por parte de Andrés Hurtado, conocido popularmente como «Chibolín», actualmente investigado por el presunto delito de lavado de activos.

Este descubrimiento pone en la mira a AH Entertainment Company, propiedad de Hurtado, como la empresa titular de estos vehículos. Según las investigaciones, los autos fueron adquiridos y donados a la compañía entre 2020 y 2023, años en los que Andrés Hurtado y su entorno habrían mantenido los bienes lejos del escrutinio público y de las indagaciones de la Fiscalía.

El Porsche Cayenne Turbo Hatchback, uno de los autos encontrados, ha tenido un recorrido particular. Inicialmente adquirido en 2011 por Carlos Alberto Sánchez Alayo, el auto fue transferido en 2012 a Orlando Sánchez Miranda y en 2014 pasó a manos de Miguel Zegarra Macchiavello, quien lo compró por 62 mil dólares mediante un crédito. En 2020, el vehículo llegó a AH Entertainment Company y en 2023 fue revendido y vuelto a comprar por la misma compañía, mostrando una serie de movimientos poco usuales.

El convertible Volvo, por su parte, fue donado en 2020 a AH Entertainment Company por el empresario Segundo Alejandría Villegas, en una transacción valorada en 10 mil dólares. La donación tiene una estructura similar a otra realizada anteriormente, cuando el futbolista Roberto Siucho le cedió un vehículo a Hurtado tras recibir su ayuda en un proceso de cambio de nacionalidad.

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