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El empresario Iván Díaz Garrido, víctima de secuestro por parte de la organización criminal «Los Pulpos» en octubre del 2023, desmintió la versión oficial de la Policía Nacional del Perú (PNP) y aseguró que su familia pagó la suma de US$ 250 mil cambio de su liberación.

Las declaraciones de Díaz Garrido contradicen lo afirmado por el General Francisco Vargas Andonaire, jefe policial en La Libertad en ese entonces, quien había indicado que no se había realizado ningún pago por el rescate.

«Fue mentira por parte de la Policía porque al final se pagó. Ellos no intervinieron en nada, más bien la gente manifestaba que todo ya estaba arreglado antes de. La Policía ya estaba antes de que lleguen a la tienda. 250 mil dólares pagaron familiares que les he pedido prestado», señaló Díaz Garrido a RPP Noticias.

El empresario también señaló a su expareja, Juanita Giver Sandoval, como presunta autora intelectual del secuestro, y solicitó a las autoridades celeridad en las investigaciones.

Cabe recordar que, el 4 de noviembre de 2023, Ivan Díaz Garrido fue hallado por la policía, envuelto en signos de tortura. Las cañas de Laredo, en la provincia de Trujillo, sirvieron de escenario para este atroz incidente. Allí, entre los cañaverales, Garrido fue hallado encadenado y con una toalla que le cubría la cabeza, víctima de un despiadado ataque.

MODUS OPERANDI DE LOS PULPOS

El modus operandi de estos criminales, conocidos como ‘Los Pulpos’, tiene un historial de actos violentos. Otro caso se remonta al 15 de noviembre de 2022, cuando la empresaria Nilda Alejandra Arrascue Espinoza, propietaria de Tiendas Tía en Trujillo, fue secuestrada por cuatro individuos que llevaban puestos chalecos policiales. El escenario fue la urbanización Palermo, donde la empresaria, junto a su hijo de 12 años, fue interceptada justo antes de ingresar a su hogar.

El chantaje se convirtió en una pesadilla para Arrascue Espinoza y su familia. Los secuestradores exigían la cifra exorbitante de un millón de dólares para su liberación. Durante 13 días, la empresaria fue rehén de sus captores, sumida en el tormento y la incertidumbre. Finalmente, la intervención policial logró liberarla.

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