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El irlandés Conor McGregor vuelve a dar que hablar, pero esta vez no por sus habilidades extraordinarias en las Artes Marciales Mixtas, sino por su discutible comportamiento fuera del octágono. Luego de realizarse la conferencia de prensa del UFC 223, donde el evento principal será el enfrentamiento por el título de peso ligero (70 kilos) protagonizado por Khabib Nurmagomedov y Max Holloway, el primero tuvo un fuerte altercado con Mcgregor.

 

En imágenes registradas en video se puede observar claramente al ex campeón de peso pluma y ligero de la UFC, junto a un grupo de vándalos, atacando al bus que trasladaba a Nurmagomedov y a los participantes del evento de UFC. Conor arrojó diversos objetos al vehículo, incluyendo barreras metálicas, sillas y tachos de basura. Tan violento fue el ataque del irlandés que Michael Chiesa terminó sufriendo un corte.

 

 

Habló el presidente de la UFC

 

 

Dana White, presidente de la UFC mostró su descontento y decepción con las acciones realizadas por “The Notorious”: «Entraron al estadio, llegaron a los camiones y comenzaron a atacarlos tirando cosas, rompieron una ventana, produjeron serios cortes a Michael Chiesa, Rose Namajunas casi fue golpeada… Esto es lo más asqueroso que ha pasado en la historia de la compañía, hay una orden de arresto para McGregor en este momento, su avión no puede salir del aeropuerto, no puede salir del estado, lo van a demandar muchas personas».

 

Después del bochornoso evento, la empresa de artes marciales mixtas más grande del mundo no dudó en tomar medidas y denunció a Mcgregor. El Departamento de Policía de Nueva York tiene una orden de arresto en contra del peleador irlandés. Aun no se conocen los motivos que llevaron al ex campeón a reaccionar de esa manera, pero hay que recordar que Conor previamente había desistido a pelear contra el ruso por «no estar preparado».