Real Madrid y Liverpool se enfrentaron en el Estadio Olímpico de Kiev por la final de la Champions League, en lo que sería un duelo bastante entretenido que, finalmente, terminaría con una victoria de los españoles por un contundente 3 a 1.
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El partido iniciaría con una presión constante por parte de los ingleses, explotando la velocidad de sus delanteros y buscando con salidas rápidas conectarse con su mejor jugador, el egipcio Mohamed Salah, quien sufría la marca incansable del capitán merengue, Sergio Ramos.
Sería justo en un choque entre ambos que se produciría el hecho, hasta el momento, más triste para los “reds”. Pues en el minuto 26, Ramos cogería el brazo del atacante egipcio mientras los dos caían al suelo, cayendo sobre él y produciendo una dura lesión de la cual la figura del club inglés no pudo recuperarse, por lo que tuvo que dejar el campo cuatro minutos después.
Esto representaría un bajón anímico en la escuadra de Liverpool, perdiendo mucho en la presión ofensiva y permitiendo a los madrilistas asentarse mejor en el mediocampo. De esta manera el partido llegaría al descanso, con un cero en el marcador.
Ya en el minuto 51, el portero Loris Karius cometería un grosero error, entregándole con las manos el balón a Karim Benzemá, quien reaccionó a estirar la pierna y añadir el balón a las redes, ante la mirada atónita de todos los jugadores e hinchas ingleses. Así, el atacante francés ponía el primero del encuentro y la ventaja para el Madrid.
El empate llegaría cuatro minutos después, tras un saque de esquina ejecutado por James Milner que conecta de cabeza el croata Dejan Lovren, permitiendo que Sadio Mané pueda sorprender a todos en el área, anticipe a Navas y añada el balón a la portería, sellando la igualdad.
Con el partido parejo, en el minuto 64 el lateral izquierdo Marcelo lanza un centro muy retrasado hacia el área, siendo el galés Gareth Bale quien dejó a todos con la boca abierta al realizar una estupenda chalaca y clavar la pelota en el ángulo superior izquierdo, haciendo inútil la volada de Karius y marcando el segundo del Real.
Ya llegados los 83 minutos, Gareth Bale ensayaría un disparo de 35 metros, aparentemente inofensivo, pero un segundo error de Karius iba a permitir que el balón ingrese al arco, subiendo el tercero de los madrilistas al marcador del encuentro, sentenciando la serie.
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Domina el continente
De esta manera, el Real Madrid logra su tercera Champions League de forma consecutiva al mando del francés Zinedine Zidane. Además, la “Casa Blanca” salva una temporada sin títulos con la obtención del tricampeonato.
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