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El frontis del Hospital Materno Infantil de Villa María del Triunfo es una zona en la que confluyen diversas personas sin hogar. Entre ellos se encuentra Alfonso Castañeda, un chalaco de 60 años quien vive los efectos de este frío que seguirá incrementando en Lima. Zoila Fernández, jefa de la oficina de Epidemiología de Diris Sur informa que ante la baja temperatura que ha llegado hasta los 12°C existe un rebrote de infecciones respiratorias como la afluencia de neumonía y la agudización del asma bronquial.

«Todavía estoy fuerte corro, camino, ahora estoy un poco mal también de las piernas los huesos… Antes jugaba pelota. Los huesos por el frío, la humedad», expresa el señor Alfonso Castañeda, a quien le tocó vivir situaciones muy duras al perder a su padre a sus cortos 13 años y al también perder a su mamá y tener que irse de su propia casa tras discrepancias con su padrastro.

Roberto Ramírez comparte en Punto Final la historia de Alfonso Castañeda, quien vive en los exteriores del Hospital Materno Infantil de Villa María del Triunfo, el cual se encuentra abandonado desde hace 7 años. Este nosocomio tiene un presupuesto de 14 millones de soles con los que debería atender a 3400 pacientes por día. El señor Alfonso, quien siempre está informado ya que le gusta leer el periódico, informa que en agosto iniciarán los trabajos en el mencionado hospital y que él tendría que retirarse del frontis del mismo.

Cuenta que se desempeña como reciclador y que está en búsqueda de una mejor oportunidad laboral para tener la posibilidad de alquilarse un cuarto y así evitar el frío que cada vez se siente más y que le viene perjudicando su estado de salud.

«Acá me dedico a juntar botellas, limpio los carritos de ahí, pero hay mucha competencia… Hasta que encuentre un trabajito, a ver si me recomiendas un trabajito. Para salir de esto de la calle. ¿Alquilarías un cuartito o algo así? Si me pagarían más alquilaría un cuarto», manifiesta el señor Alfonso uno de sus anhelos a Punto Final.

El señor Alfonso cuenta que tiene dolor en los huesos de las piernas ante el frío al que se ve expuesto. Y es que siendo aún otoño, Lima ya registró 12 °C, temperatura que seguirá disminuyendo en invierno. Debido a esto los hospitales han incrementado en un 50% su atención por temas respiratorios a pacientes que hacen cola desde las 5 de la mañana para conseguir una cita médica. Solo en el sur, ha aumentado en un 15% la atención a niños menores de 5 años y a adultos mayores.

«Hemos tenido un brote inmenso de dengue, por ejemplo, y ahora tenemos rebrote de infecciones respiratorias… Ya tenemos una alerta epidemiológica a nivel de todo el país», informa Zoila Fernández, jefa de Epidemiología de la Diris Lima Sur. «De 10 personas, 3 a 4 son asmáticos», agrega la neumóloga Isabel Cam Ramos.

Debido a que el Hospital Materno Infantil de Villa María del Triunfo está abandonado desde hace 7 años, motivo por el que atienda solo una posta en la zona. Punto Final ingresó al hospital de San Juan de Lurigancho en donde registró que personas que venían haciendo su cola desde las 5:00 de la mañana no eran finalmente atendidos debido a que sus citas eran canceladas. Recién cerca de las 9:00 de la mañana, a pesar de que la cita era a las 8, les avisaron que el neumólogo Changa no había venido.

«Ya me voy a morir…cuanto se ha demorado…no va a venir el doctor…voy a comunicar a mi jefa, se supone que reprograman…uno se muere», manifestó uno de los pacientes ante la realidad que viven muchos.

RECOMENDACIONES ANTE EL REBROTE DE INFECCIONES RESPIRATORIAS

Jefa de la Oficina Epidemiología de la Diri Lima Sur, Zoila Fernández, brinda algunas recomendaciones para estar más protegido ante el rebrote de infecciones respiratorias, que se agudiza ante este frío.

• Buena alimentación.
• Protección de la vivienda, para que puedan tener poco acceso al frío.
• Tener la vestimenta adecuada de protección al frío dentro de la casa y fuera de ella también.

Recomendaciones que por ahora desafortunadamente el señor Alfonso Castañeda no podrá seguir. El reciclador chalaco, quien viven en el frontis del abandonado Hospital Materno Infantil de Villa María del Triunfo, puede desayunar solo en ocasiones. «A veces cuando tengo plata me voy acá a la esquina en la desayunera pero sí también me invitan y le ayudo a llevar la basura ahí lo que sobra», puntualizó Alfonso.

No cuenta frazadas para abrigarse y la protección en su indumentaria tampoco es la óptima. No tiene ropa de invierno, ni de verano, y la correa que usa es un conjunto de cables de teléfono o de Internet. Con lo que sí cuenta es con la compañía de su perro, quien siempre lo sigue a donde va.

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