Latinanoticias.pe

Según el expediente fiscal que reveló un medio local, se sostiene que el crimen ocurrido al interior del restaurante ‘Panchita’, en el que Rosa Benavides perdió la vida y Felipe O’Neill terminó suicidándose, no fue un feminicidio, sino un homicidio culposo. A continuación, más detalles de la teoría de la fiscalía.

En la carpeta fiscal se incluyen testimonios de los presentes durante el almuerzo en ‘Panchita’, así como también de los padres, amigos y colegas de trabajo de los fallecidos. Además de descripción de las imágenes proporcionadas por las cámaras de seguridad del restaurante miraflorino.

“Habiéndose determinado que la única relación que existía entre los occisos era laboral como compañeros de trabajo; asimismo, siendo el feminicidio un delito de resultado y de acción dolosa; se advierte de las diligencias desarrolladas a la fecha, que los hechos configurarían un delito de acción culposa”, se lee en el documento.

La fiscal Palacios concluyó que el caso no configura como feminicidio, sino como un homicidio culposo, por lo que procedió a derivar la carpeta a la fiscal penal de Miraflores, Janet Bernal, quién será la encargada de finalizar la investigación.

¿CUÁL ERA EL NEXO ENTRE LOS FALLECIDOS?

Según la declaración testimonial de los presentes a la Fiscalía, un ruido fuerte “como si se hubiese reventado un globo” fue lo que se escuchó segundos antes de que Rosa Benavides se desplomara sobre la mesa en la que almorzaba con sus compañeros de trabajo.

La carpeta fiscal del caso, revelada por Perú 21, incluye la declaración de María Miranda Benavides, jefa en Niubiz de los hoy fallecidos, con los que conversaba cuando sucedió el primer disparo.

En el testimonio, Miranda Benavides sostiene que lo primero que hizo O’Neill al ver que Rosa se desvaneció fue pararse y llamar a emergencias. Señaló también que entre ellos no existía ningún tipo de celo profesional o relación amorosa, lo mismo que sostuvieron ante el interrogatorio fiscal todos los demás presentes en la mesa.

Alberto O’Neill, hermano mayor de Felipe, mencionó a la Fiscalía que no conocía a Rosa Benavides, así como también que su hermano estuvo en una relación con otra persona que terminó hace tres meses atrás. Añadió que Felipe hacía fisicoculturismo y era de personalidad sobreprotectora, “por lo que no hubiese podido vivir tranquilo con el cargo de conciencia de haberle quitado la vida a su compañera de trabajo”.

Las necropsias de los fallecidos también fueron incluidas en la carpeta fiscal. Ambas fueron emitidas por la Unidad de Tanatología Forense del Instituto de Medicina Legal. En el caso de Benavides Torres, su diagnóstico de muerte fue por traumatismo toráxico abdominal abierto por proyectil de arma de fuego. Por su lado, la necropsia de O’Neill concluye que su muerte fue por traumatismo craneoencefálico por proyectil de arma de fuego.