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Estados Unidos informó que enviará bombas de racimo Ucrania para que este país las use contra las fuerzas rusas. Este anuncio ha provocado una polémica, la cual está creciendo. Y es que expertos de diferentes países han señalado que este tipo de armamento causa un enorme daño colateral y podría alcanzar blancos civiles. 

Las bombas de racimo son proyectiles que transportan en su interior decenas o, incluso, cientos de bombas más pequeñas. Pueden lanzarse desde aviones, misiles o dispararse desde artillería, camiones navales o lanzacohetes. “No son dirigidas. Y ese es el problema humanitario, que como no son dirigidas se pueden esparcir y alcanzar zonas civiles que no tienen nada que ver en esto”, dice Guillermo Pacheco, de Security College.

Y es precisamente este hecho de que se puedan esparcir lo que preocupa a las organizaciones humanitarias, que son parte de la coalición contra las bombas cluster, como Human Rights Watch. De hecho, esta ONG ha indicado que tanto Ucrania como Rusia han matado a civiles en la guerra usando estas bombas de racimo. 

“Las bombas de racimo puede causar heridas a civiles en el momento del ataque y después, porque esparcen municiones en una área amplia y pueden quedar por tiempo como un campo minado”, señala Bonnie Docherty, de Human Rights Watch.

En Ucrania, indican que el anuncio de la ayuda con este armamento les cayó de sorpresa, porque afirman que por muchos meses la administración de Joe Biden les dijo que no consideraría esta opción. “Yo pienso que lo que cambió es que el Gobierno de Estados Unidos y los gobiernos aliados de Ucrania han usado mucho armamento y se les está acabando”, apunta Jeff Meer, de la organización Humanity & Inclusion.

GRAN PREOCUPACIÓN

Por su parte, el Comité Internacional de la Cruz Roja ha indicado que las bombas de racimo son más polémicas que otras bombas y ha advertido que entre el 10 y 40% de las municiones fallan. 

“Nuestra preocupación a nivel mundial se encuentra en las consecuencias humanitarias de las bombas de racimo, no solo hoy, sino en los años venideros. Pueden matar y mutilar indiscriminadamente y causar un sufrimiento humano generalizado”, finalizó la Cruz Roja.