Latinanoticias.pe

SANTIAGO, 21 ene (Reuters) -Los operadores de activos chilenos esperan atentamente el anuncio del futuro gabinete que hará durante la jornada del viernes el presidente electo Gabriel Boric para empezar a avanzar en las reformas necesarias comprometidas en su plan de gobierno.

Muchas especulaciones han surgido en las recientes semanas sobre cómo quedará conformado equipo ministerial, que tendrá presencia de partidos de la coalición centrista que gobernó mayormente el país desde el retorno a la democracia en 1990.

El nombre del futuro ministro de Hacienda ha suscitado mucho interés y en días recientes surgió incluso la opción de que sea el actual presidente del Banco Central, Mario Marcel.

Para Jorge Selaive, economista jefe de Scotiabank Chile, el mercado ha internalizado un titular de las finanzas públicas del ala moderada de izquierda, lo que explica en parte la recuperación que ha tenido la moneda local.

«Se ha devuelto una pequeña parte del riesgo político que tiene el CLP (peso chileno) desde octubre 2019, sin embargo, aún tiene un gran castigo en conjunto con bolsa y tasas de interés», dijo a Reuters.

Tras registrar un fuerte desplome tras el triunfo de Boric en diciembre, el peso chileno ha recuperado terreno y está entre las divisas de mayores ganancias en lo que va de año. El viernes abrió bajo las 800 unidades por dólar por primera vez desde noviembre.

Selaive dijo que Marcel sería excelente en el cargo pero consideró que sería mejor mantenerlo en el Banco Central para que avanzara más en su trabajo con la política monetaria. Señaló que otros nombres como Guillermo Larrain, Roberto Zahler o Máximo Pacheco entregarían una buena señal al mercado.

Chile terminó el año pasado como la economía de mejor desempeño del mundo, impulsada por generosas transferencias fiscales y rondas de retiros anticipados de pensiones privadas para ayudar el impacto de la pandemia de COVID-19 en las familias.

Sin embargo, el consecuente recalentamiento de la economía y la incertidumbre mantienen alerta a los inversionistas.

«Uno de los mayores desafíos de Boric será enfriar la economía y conservar el apoyo popular. Queda por ver cómo el inexperto líder lidiará con la presión para aumentar el gasto social mientras tiene que ejecutar recortes de gastos equivalentes al 5% del PIB, como lo implica el presupuesto de 2022», dijo Oxford Economics en un informe.

Agregó que si bien el presidente electo ha moderado su tono, lo que ayudó a una recuperación de la moneda, se espera que vuelva la volatilidad tras anunciar su gabinete.

Boric ha prometido profundos cambios al sistema neoliberal que impulsó el crecimiento del país sudamericano en las últimas décadas, pero que también profundizó la desigualdad, lo que detonó un estallido social a finales de 2019.

El exdirigente estudiantil, que tuvo una contundente victoria en las elecciones de diciembre, prometió reformar el sistema privado de pensiones, de salud y aumentar los impuestos para financiar un mayor gasto social.

Sin embargo, los expertos esperan que el dividido Congreso con el que tendrá que gobernar Boric -quien asumirá el 11 de marzo- le llevará a moderar la magnitud de los ajustes y buscar consensos con sectores más moderados.