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15 personas fueron estafadas por un hombre que creían que era su amigo, pues lo conocían desde el colegio y el trabajo y nunca pensaron que podía robarles gran cantidad de dinero con el cuento de la compra de celulares por WhatsApp.

Se trata de Cristhoper Joel Gomez Neciosup, de 34 años, quien es investigado por la comisaría de Miraflores y tuvo una investigación en el Ministerio Público, pero esta institución archivó la denuncia por una cuestión de “exceso de confianza”, según una de las víctimas.

“Cristhopher ha sido compañero mío de infancia del colegio, en ningún momento pensé que él podía tener este tipo de acción, engañar con tanto dinero. Se le depositó un promedio de S/ 6800 por la compra de seis equipos, yo estaba intermediando también por otros compañeros de mi propio trabajo que en ese momento nos encontrábamos en Talara”, declaró Luis Polo. 

Ahora, Luis Polo ha tenido que endeudarse para subsanar el daño que le generó a sus compañeros por obrar como intermediario en la adquisición de los supuestos equipos y se siente indignado con la resolución de la Fiscalía que archivó su caso y, por esta razón, decidió denunciarlo por redes sociales. 

Polo sostuvo que después de la denuncia por redes, otro grupo de personas se sumaron y empezaron a contar su caso de estafa cometido por la misma persona, algo que lo dejó sorprendido y esperanzado de hallar justicia.

“A raíz de todas las denuncias que se han presentado, las publicaciones que he hecho por mi cuenta y otras personas también allegadas, es que han salido más víctimas, víctimas que también han confiado en él, en los negocios que él supuestamente hacía y creo que la suma al momento asciende a casi S/ 200 000 en la estafa que este sujeto ha estado realizando”, precisó. 

Testimonio de otra víctima

Otra de sus víctimas era una madre de familia que estaba pasando por un momento difícil debido a que habían operado recientemente a su hijo. En esas circunstancias, Cristhoper le expresó su solidaridad y apoyo y luego le comentó su negocio de venta de celulares por WhatsaApp.

Ella se animó a adquirir uno de sus equipos, pero, para ello, tuvo que prestarse dinero, ya que estaba haciendo gastos y no disponía de muchos recursos. Asimismo, recomendó a otros compañeros el servicio de su amigo.

«Lo que si pude hacer es comentarles a mis compañeras de trabajo, a un familiar, a un sobrino mío y a una amiga de confianza, entonces mi compañero y mi sobrino aceptaron, pero a mi me prestan un dinero para poder adquirirlo, el error fue no buscar más información», lamentó.

La comisaría de Miraflores investiga este caso y todas las víctimas esperan que la Policía Nacional capturé a este hombre que, según dicen, «se jactaba de ser ingeniero».