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RÍO DE JANEIRO, 19 ene (Reuters) – Cientos de policías fuertemente armados ocuparon el miércoles por la mañana el barrio de Jacarezinho de Río de Janeiro, en un renovado esfuerzo por garantizar la seguridad y los servicios públicos a las favelas dominadas por bandas de traficantes de drogas, dijeron las autoridades.

El gobernador Claudio Castro dijo que la operación era el inicio de una nueva ofensiva para transformar las zonas pobres, haciéndose eco de la retórica de las Unidades de Policía Pacificadora (UPP) que desplazaron a las bandas violentas de la ciudad antes de los Juegos Olímpicos de 2016.

La Policía Militar de Río informó que no hubo encuentros violentos en la operación que había comenzado en dos favelas. Un portavoz dijo que la gran cantidad de fuerzas policiales desplegadas disuadió cualquier respuesta armada de las pandillas.

Jacarezinho es una favela en expansión en el violento sector norte de Río de Janeiro, la segunda ciudad más grande de Brasil, donde una redada policial en mayo resultó en 29 muertos, incluido un oficial, y provocó fuertes críticas https://www.reuters.com/world/americas/brazil-judge-sees-signs-arbitrary-execution-rio-police-raid-2021-05-07 de grupos de derechos humanos.

La policía dijo que planea ocupar otras favelas cercanas, como Manguinhos, Bandeira 2 y Conjunto Morar Carioca.

Castro dijo en Twitter que daría detalles el sábado de nuevos planes para restablecer la seguridad y «mejorar la vida de quienes viven en estas áreas».