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Óscar Becerra, actual ministro de Educación, propuso a Manuel Castillo Venegas como nuevo jefe de la Superintendencia Nacional de Educación (Sunedu). Tan pronto asumió funciones, se reconoció a Santos Montaño Roalcaba, su excliente, como rector de la Universidad Nacional de Piura.

Un reportaje de Punto Final da cuenta que Castillo defendió a Santos Montaño ante la Comisión de Educación del Congreso en julio de 2022, en el proceso legal que inició luego de no ser reconocido como rector de la UNP, pues se denunciaron irregularidades en la elección de 2019.

Menos de un año después, Castillo, como nuevo superintendente de Sunedu, colocó en puestos clave al excongresista fujimorista Carlos Mesía y a Prysyla Flores, cuyas oficinas permitieron que se designe a Montaño como rector de la universidad.

Tras la decisión, trabajadores de la entidad encargada de regular la educación superior en el país cuestionaron a Castillo Venegas, no solo por la designación de Montaño, sino por la postura que mostró ante rectores de diversas instituciones universitarias.

En una conferencia junto con dichas autoridades, Castillo les pidió disculpas y afirmó que su gestión será diferente a las anteriores, las cuales calificó como «persecutoria, coactiva y sancionadora». «Queremos ser como el padre de familia, amoroso, complaciente», enfatizó.

SANTOS MONTAÑO SE DEFIENDE

En diálogo con Punto Final, el rector de la UNP descartó un conflicto de intereses y aseveró que su nombramiento es legal. «Yo lo conozco como abogado, no sé si ha tenido cargos o no, en todo caso él tendrá que manifestarlo», aseguró.

«Estos grupos tienen mucho mayor poder y se sienten empoderados, porque controlan prácticamente todas las instituciones, el Congreso, el Tribunal Constitucional«, señaló al respecto Walter Albán, exministro y miembro de Proética.