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Este mes, Cusco está en los ojos del mundo gracias al famoso Inti Raymi. Pero las cámaras de Reporte Semanal se adentraron en el centro Manos de la comunidad, ubicado en el centro poblado Huayllarcocha, para viajar en el tiempo hasta el imperio del Tahuantinsuyo.

Situada a 3700 m.s.n.m., esta localidad ofrece a los turistas una experiencia inmersiva en los ritos que la cultura incaica llevaba a cabo. A través de un montaje, el inca y su coya (esposa principal), acompañados por su séquito, realizan la ceremonia de ofrenda a la tierra, conocido como Hatun Willka Haywarikuy.

Quien presencia este ritual se convierte en testigo de la danza Wallatas, realizada también en honor a la Pachamama. Toda una escena que permite conocer de primera mano cómo se vivían las creencias ancestrales que forman parte de la cosmovisión andina.

TEJIDO Y FAUNA EN EL CUSCO ANCESTRAL

En definitiva, la región del Cusco cuenta con más de un atractivo proveniente de sus muchas comunidades que todavía mantienen viva las creencias del antiguo imperio. Entre ellas, destaca la de Qeros, considerada por muchos como el último ayllu de los incas.

Allí, los turistas nacionales y extranjeros encuentran a personas que ejecutan un arte tradicional: el tejido. Sus productos, de colores tan vivaces como los de un arcoiris, llenan de alegría sus calles. Cualquiera puede atestiguar cómo llevan a cabo la técnica del hilado.

Por otro lado, en el centro Manos de la comunidad, existe un espacio ideal para apreciar la majestuosidad del cóndor andino, así como acariciar el suave pelaje de las llamas, alpacas, vicuñas y guanacos.

Para acceder a esta ruta turística alternativa, puede revisar el aplicativo My Destination, el cual que proporciona información histórica sobre atractivos turísticos y sitios arqueológicos del Perú. Cusco, uno de los destinos ineludibles en nuestro país, todavía tiene un sinfín de encantos por descubrir.