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Nació en Cusco, se entrena en Huancayo y busca reinar en Lima 2019. Yuri Labra ha tenido que sacrificar muchas cosas para destacar en el atletismo peruano y ser una de las principales cartas de medalla en los Juegos Panamericanos.
 
A sus cortos veinte años, tuvo que dejar su Checca natal (provincia de Canas, Cusco) e irse a radicar a Huancayo, donde se entrenan los principales atletas peruanos especializados en pruebas de fondo, como Wily Canchanya, Gladys Tejeda, Raúl Pacheco, Christian Pacheco y Clara Canchanya, bajo el mando de Rodolfo Gómez, ex entrenador del equipo peruano de maratón. Allí ha logrado abrirse paso en las pruebas de 5 mil y 10 mil metros, así como en 3 mil metros con obstáculos.
 
Precisamente, él será el representante peruano en la disciplina de 3 mil metros con obstáculos durante los Juegos Panamericanos Lima 2019. Ganó su cupo en este megaevento de la forma más emocionante: ganando la medalla de oro en el Sudamericano realizado en Cochabamba, Bolivia, el año pasado. En esa competencia se llevó el triunfo con un tiempo de 9 minutos, 1 segundo y 95 centésimas, ganando por apenas 4 centésimas, en un final de fotografía, al crédito colombiano Gerald Giraldo.
 
Pese a la distancia, recibe a diario las buenas vibras que le mandan sus familiares y demás paisanos cusqueños. Yuri Labra agradece estas muestras de afecto, así como el apoyo que le da la empresa privada, más precisamente Camisea, pues constituyen el aire que necesita para lograr sus próximos grandes objetivos: mejorar sus marcas personales (posee el récord nacional), conseguir el oro en los Juegos Panamericanos Lima 2019 y llegar al podio en los Juegos Olímpicos Tokio 2020.