La parlamentaria cuestionó a los ministros Morgan Quero y Ángela Hernández por no asistir a las comisiones del Parlamento para informar las acciones que han tomado frente a los casos de violación sexual de menores que se han registrado en Condorcanqui (Amazonas).
La congresista Ruth Luque (Cambio Democrático) informó que impulsa una moción de censura contra los ministros Morgan Quero (Educación) y Ángela Hernández (Mujer) por las polémicas declaraciones que brindaron por el caso de los niños y las niñas de la comunidades nativas Awajún y Wampis, ubicadas en la provincia de Condorcanqui (Amazonas), quienes fueron víctimas de violación sexual.
«Ante la ausencia sistemática de los ministros de Educación y ministra de la Mujer en las comisiones del Congreso para rendir cuentas de su accionar en la problemática de la grave violación sexual contra la niñez indígena en Condorcanqui hemos decidido impulsar moción de censura, contra ambos ministros», indicó Luque en su cuenta personal en la red social X (antes Twitter).
La decisión de la parlamentaria de izquierda es que los ministros Quero y Hernández no asistieron a las sesiones de las comisiones de Pueblos Andinos y la Mujer para que brinden detalles de las acciones que han desplegado en Condorcanqui tras reportarse los casos de abuso sexual de menores de edad que habrían sido ultrajados por sus profesores.
Por lo pronto, las congresistas Susel Paredes (Cambio Democrático) y Flor Pablo (no agrupada) han sido las primeras en sumarse a la censura promovida por su colega Luque. Según el reglamento del Parlamento, se necesitan 33 firmas para que sea presentado. Al menos 66 votos deben existir para destituir a los titulares de Educación y Mujer.
Cabe mencionar que la congresista Luque ya ha presentado una denuncia penal contra los titulares de Educación y la Mujer ante la Fiscalía Supraprovincial Especializada en Derechos Humanos e Interculturalidad de Lima por la comisión de los presuntos delitos por el presunto delito de discriminación e incitación a la discriminación.
«Se puede evidenciar la discriminación abierta contra los pueblos indígenas Awajún y Wampis, a los cuales se les atribuye características deshumanizadoras, a fin de normalizar una cultura de la violación. Además, este tipo de discriminaciones puede explicar la exclusión de la población awajún respecto de políticas de educación, salud y prevención efectiva que debería desplegar los sectores mencionados del gobierno, ante la problemática descrita, lo cual confirmaría la discriminación ejercida contra este grupo humano», se lee en el documento.
La controversia inició a partir de la difusión de la noticia que salió que niñas y niñas de las comunidades awajún fueron diagnosticados con VIH luego que sufrieran abusos sexuales por partes de sus profesores. Ante ello, el ministro de Educación, Morgan Quero, fue el primero en pronunciarse ante la prensa sobre este hecho al que calificó como «práctica cultural».
«Si es una práctica cultural, lamentablemente, que sucede los pueblos amazónicos para ejercer una forma de construcción familiar con las jovencitas, entonces nosotros vamos a ser muy prudentes, pero también vamos a exigirle una respuesta a la comunidad en relación con los descargos que correspondan», mencionó.
Por si fuera poco, la ministra de la Mujer, Ángela Hernández, también tuvo una postura controversial similar a Quero. «Se trata efectivamente de prácticas culturales [en alusión a las declaraciones del ministro de Educación reseñadas precedentemente] que debemos desterrar. Hay que informar a las niñas y a las adolescentes sobre todo que es importante postergar sus relaciones sexuales y si las van a hacer, que sean protegidas», agregó.
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