A pocos minutos de que el Poder Judicial le dictara quince meses de prisión preventiva en su contra, Keiko Fujimori publicó en sus redes sociales un mensaje sobre lo que parecía inminente.
Visiblemente desencajada, la lideresa de Fuerza Popular acusó al Gobierno de la decisión del Poder Judicial. “El juez Víctor Zúñiga decidió enviarme injustamente a la cárcel por un segundo pedido de prisión preventiva. Esto a pesar de que el Fiscal no pudo presentar ni un solo elemento nuevo en mi contra”, aseveró.
“Esto no es justicia, esto es venganza política promovida por muchos intereses, por ejemplo, un Gobierno que quiere seguir concentrando todo el poder para evitar a toda costa su fiscalización”, continuó su mensaje.
En ese sentido, anunció que tomaría tres medidas: entregarse (lo que hizo minutos después), dar una respuesta política a lo que considera una decisión política y pedir a su esposo que presente su caso a gobiernos extranjeros y organismos internacionales.
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