Ciudad del Perú se encuentra sumergida desde hace casi una semana

Situación preocupante. El desbordamiento de los ríos Acre y Yaverija en la ciudad de Iñapari, Madre de Dios, ha sumido a esta región en una crisis sin precedentes. Desde el 21 de febrero, las intensas lluvias han provocado inundaciones que han afectado gravemente a la capital de la provincia de Tahuamanu.

El nivel del agua alcanzó una altura de hasta 1.20 metros, penetrando en viviendas y edificaciones tanto públicas como privadas, según señala El Comercio.

Entre las infraestructuras afectadas se encuentran la sede del Banco de la Nación, el Juzgado Mixto de la Corte Superior de Justicia, el Puesto de Control y Vigilancia Fronteriza de la Policía, la Subprefectura y la Municipalidad Provincial de Iñapari. Además, el único Puesto de Salud de la ciudad ha quedado colapsado, junto con numerosos comercios y viviendas.

Fuente: El Comercio

Cabe destacar que la Carretera Interoceánica, una importante vía de comunicación, también ha sido afectada por las inundaciones.

Los puentes, como el del río Tahuamanu, están en peligro debido al aumento del nivel del agua, lo que compromete sus bases.

En ese sentido, el exalcalde Provincial de Tahuamanu, Abraham Cardozo Muozully, ha señalado que esta situación es sin precedentes. Antes de la construcción del Puente de Integración en 2006, no se habían registrado desbordamientos del río Acre. Sin embargo, desde entonces, las inundaciones se han vuelto más frecuentes debido a las modificaciones en el cauce del río.

Fuente: El Comercio.

A pesar de la magnitud del desastre, hasta el momento no se han reportado víctimas mortales. La rápida acción de la ciudadanía local permitió evacuar a todos a zonas más seguras. Sin embargo, el apoyo de las autoridades locales y regionales ha sido insuficiente. Aunque se han realizado algunas acciones, como la entrega de agua embotellada por parte de los bomberos y la Cámara de Comercio, se requieren medidas más amplias y coordinadas para enfrentar esta crisis.

Cardozo Muozully viene medidas urgentes para reactivar la economía local, ya que el comercio de la ciudad ha sido gravemente afectado y podría tardar semanas en recuperarse. Además, se necesita el apoyo de las autoridades para restablecer el funcionamiento de las entidades públicas en la zona afectada. Sin este apoyo, la recuperación de Iñapari será aún más difícil y prolongada.