Padres esperan largos meses para conseguir una cita. Pese a ello, más de 20 especialistas dejaron de laborar alegando que "se expusieron" a radioactividad.
El Instituto Nacional de Salud del Niño reúne a los especialistas pediátricos más importantes del país. Para los padres, conseguir una cita aquí es toda una hazaña, con varios intentándolo desde hace meses. Un informe de la Contraloría daría cuenta de uno de los motivos.
De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS), la sobreexposición a la radiación puede ser mortal para el humano. En ese escenario, se creó en el Perú la ley que regula el descanso físico adicional para el personal de salud que esté expuesto a radiaciones ionizantes o sustancias radiactivas.
«Todo personal médico, auxiliar, administrativo que trabaje en una zona donde haya exposición de sustancias radioactivas debe tener, por ley, diez días de descanso semestral, tanto en la parte privada como en la pública», precisa el doctor Jhon Cruzado, experto en salud pública.
Este beneficio debería de otorgarse únicamente a los profesionales vinculados directamente con la especialización de radiología y medicina nuclear. Sin embargo, el documento de la Contraloría precisa que más de 20 médicos ajenos a dichas especialidades se beneficiaron con los descansos.
El informe precisa que siete médicos con especialidad en cirugía general y 27 médicos anestesiólogos, pese a que no cumplieron labores continuas en áreas donde se encuentren expuestos a radiaciones, obtuvieron este favorecimiento.
Por ejemplo, la anestesióloga Carmen Ruiz Vega gozó de 30 días de licencia, equivalentes a 6.476 soles. Además, Ernesto Ramírez Rodríguez, de la misma especialidad, tuvo 40 horas de licencia por radiación, equivalentes a 8.588 soles.
Ruiz, en su defensa, aseguró que cumple con labores tales como tomografías. “Aquí nadie ha robado nada, nadie ha estafado, ni somos políticos. Somos médicos que salvamos vidas”, aseveró.
En anestesiología, durante enero a diciembre de 2022, se programaron solo 180 horas de trabajo de las 11.800 que debieron ser. Por otro lado, en la especialidad de cirugía general, durante el mismo periodo, se debieron programar 15.100 horas de consultas externas. Sin embargo, solo se programaron 1.512.
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