A los menores de edad se les encontró una pistola, un revólver, municiones y seis tarjetas de diferentes bancos en sus mochilas.
El hallazgo de armas de fuego y municiones en las mochilas de dos alumnos del Colegio Fe y Alegría de San Juan de Lurigancho ha causado preocupación entre los padres y madres de familia de ese centro educativo. Visiblemente molestos, llegaron hasta la escuela con el objetivo de hablar con la directora del colegio. Ellos golpearon muy fuerte la puerta.
Ante la insistencia de los padres, se reunieron los representantes de la Apafa del colegio, un fiscal de la segunda Fiscalía de Familia de San Juan de Lurigancho y representantes de la Ugel. El objetivo fue tomar decisiones sobre la situación de los dos estudiantes de 15 años, que ingresaron al colegio con una pistola, un revólver, municiones y seis tarjetas de diferentes bancos en sus mochilas.
Giovanna Olórtegui, presidenta de Apafa, indicó que se va a sensibilizar a los padres de los estudiantes para que, cuidando la integridad de los menores de edad, lleven las clases de manera remota. Asimismo, quedó pendiente tomar una decisión sobre si, a partir de ahora, se revisarán las mochilas antes del ingreso a clases.
La viceministra de Gestión Pedagógica, Miriam Ponce, señaló que “si ya hay situaciones de armas de fuego, evidentemente esto se constituye en un delito. Y eso tiene que estar claro en las instancias correspondientes. Independientemente de que sean menores de edad, ya están incurriendo en delitos y, eso lo tienen que ver las instancias respectivas”.
Por su parte, el psicólogo Manuel Saravia recomendó implementar el servicio de psicología en todas las escuelas, y mejorar la comunicación entre padres e hijos. «Tiene que haber un trabajo de la escuela con la familia. Yo siempre les recomiendo a los padres siquiera 20 minutos diarios», remarcó.
En tanto, Sucamec ha ordenado el internamiento definitivo de las armas intervenidas a los escolares, confirmando que eran propiedad de uno de los familiares, cuya licencia venció en el 2006. El titular de dichas armas enfrentará un proceso por el delito contra la seguridad pública y tenencia ilegal de armas de fuego.
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