Vecinos denuncian que estas vías se han vuelto un foco infeccioso, dado que los desechos abundan a lo largo de la zona. Buzones sin tapas ponen en riego la integridad de los transeúntes.
Vecinos chalacos alegan estar cansados de las obras inconclusas que han dejado las autoridades por más de dos años. Ellos denunciaron que sus pistas y veredas se encuentran así desde antes del inicio de la pandemia.
El equipo de la Ruta Vecinal llegó hasta el jirón Apurímac, en el distrito del Callao, para evidenciar que las calles de estas transitadas vías son realmente un foco infeccioso, puesto que la basura, las moscas y el mal olor de los desechos se han convertido en parte de la cotidianidad que los moradores deben de afrontar.
Asimismo, las más de 200 familias que residen en la zona señalan que se ven imposibilitadas de poder trasladar a personas con sillas de ruedas y adultos mayores a consecuencia del estado de las pistas. Indicaron que en más de una oportunidad se han accidentado.
No obstante, un ciudadano mostró a las cámaras de Latina Noticias que existen buzones sin tapas, lo cual no solo genera pestilencia, sino que también pone en riesgo la integridad de los transeúntes que caminan por el lugar.
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