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16 nov (Reuters) – El parlamento de Nicaragua, controlado por el oficialismo, aprobó el martes una resolución pidiendo al presidente Daniel Ortega que denuncie la Carta Democrática de la Organización de Estados Americanos (OEA), para que el país deje de ser parte del organismo.

La OEA declaró la semana pasada ilegítima las elecciones del 7 de noviembre en la nación centroamericana, donde Ortega fue reelegido, en medio de duras críticas de la comunidad internacional por la detención previa de varios de sus contrincantes y acciones contra la libertad de prensa.

«Denunciar la Carta Democrática significa salir de ese organismo colonialista», afirmó el parlamentario oficialista Carlos López sobre el dictamen contra la OEA, aprobado con 83 votos a favor, ninguno en contra, y dos abstenciones.

El analista político y exdiputado nicaragüense Elíseo Núñez, dijo a Reuters que la medida podría permitir al mandatario centroamericano ganar tiempo. «Si Ortega denuncia la carta de la OEA iniciaría un proceso de dos años para su salida, es decir se gana dos años y después ve qué pasa».

Algo similar sucedió con Venezuela cuando, en abril de 2017, formalizó su renuncia al organismo hemisférico al que ha catalogado de «títere del imperio».

Con 25 votos a favor y siete abstenciones, el Consejo Permanente de la OEA aprobó el viernes una resolución que afirma que las elecciones del 7 de noviembre «no fueron libres, justas ni transparentes y carecen de legitimidad democrática».

El documento instruye al propio Consejo de Seguridad a realizar una evaluación de la situación para tomar «las medidas apropiadas», aunque sin especificar cuáles serían.