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La congresista Rosío Torres se encuentra en el ojo de la tormenta luego de que se descubrió que su sobrino, continuo visitante del Congreso, le cobraba una parte de su sueldo a los trabajadores de su despacho.

Lupe Muñoz, integrante de la Unidad de Investigación de Punto Final, reveló que la investigación nació a partir del dato sobre que el sobrino de la congresista ingresaba a su despacho varias veces y que él se encargaba de cobrar un “cupo” a los trabajadores.

“Luego de una minuciosa investigación, accedimos al detalle de todas las transferencias hechas al sobrino. Al pedir los descargos ella quedó en evidencia. En vez de recriminar al sobrino sobre su accionar, puso el mensaje de que tienen el enemigo en casa, de que esto se estaba preparando desde hace tiempo”, dijo la periodista.

Ella aseveró que durante varios días se le pidió sus descargos, tanto a la congresista como al sobrino, pero que no hubo respuesta alguna.

Asimismo, señaló que, ante cualquier acto de corrupción, puedes enviar un mensaje al correo investigacion@latina.pe y que, en todos los casos, se guardará la debida reserva y se respetará el anonimato de los denunciantes.