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LA HAYA, 21 abr (Reuters) -La Corte Internacional de Justicia (CIJ) dictaminó el jueves que Colombia debe «cesar de inmediato» los patrullajes y sus intentos por controlar la pesca en áreas del Caribe que, según el tribunal, están dentro de la zona económica exclusiva de Nicaragua.

El tribunal dictaminó que las actividades de Colombia en la zona nicaragüense, incluida la cesión de derechos de pesca a terceros y la interferencia en la investigación marítima, violan los derechos soberanos de Nicaragua.

En 2012, la CIJ dictó una sentencia que redujo la extensión del mar que pertenece a Colombia en el Caribe y sus derechos en el área.

Las nuevas fronteras marítimas aumentaron la plataforma continental y la zona de exclusión económica de Nicaragua en el Caribe, dándole acceso a los depósitos submarinos de petróleo y gas, así como a los derechos de pesca en esas aguas.

Los jueces de la CIJ también ordenaron el jueves a Colombia cambiar un decreto presidencial de 2013 que estableció una zona alrededor de las islas colombianas en el área en disputa.

Según la corte, la zona, tal y como se menciona en el decreto, es demasiado grande y los poderes que Colombia dice tener en el documento no se ajustan al derecho internacional consuetudinario.

No obstante, tras conocer el fallo, el presidente colombiano, Iván Duque, dijo desde la isla de San Andrés que la Corte reconoció el derecho de Colombia a navegar libremente en el área para luchar contra los delitos transnacionales y el narcotráfico.

Según el mandatario, la unidad, integridad e indivisibilidad del Archipiélago de San Andrés, Providencia, Santa Catalina y los Cayos, y todas las islas que lo conforman, se mantiene.

Duque afirmó que de acuerdo con el fallo los pescadores raizales pueden navegar en el Caribe hasta llegar a los bancos de pesca que tienen y que, además, están en el mar territorial colombiano y en su zona económica exclusiva.

El mandatario afirmó que Nicaragua cerró desde hace años la posibilidad de un acuerdo directo y calificó el actual gobierno del país centroamericano como «una oprobiosa dictadura que desconoce los derechos fundamentales de la oposición, la prensa libre, la iniciativa privada y las libertades ciudadanas».

«De conformidad con el derecho internacional, procuraremos la protección del medio ambiente marino y la continuidad de la interdicción del tráfico ilícito de estupefacientes y la lucha contra los delitos transnacionales en el área», dijo Duque en un discurso junto a la cúpula militar y funcionarios del gobierno.

Por su parte Carlos Gustavo Arrieta, uno de los representantes de Colombia ante la CIJ se declaró satisfecho con el fallo y dijo que es muy favorable para el país sudamericano.

Colombia argumenta que sus límites solo se pueden modificar mediante un tratado ratificado por el Congreso, por lo que no puede aplicar en su totalidad el fallo de la corte de 2012.

Los abogados de Nicaragua en el tribunal declinaron hacer comentarios sobre el fallo.