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CIUDAD DE PANAMÁ, 12 abr (Reuters) – Los migrantes que cruzaron la peligrosa y remota región del Darién, que separa Colombia de Panamá, rumbo hacia Norteamérica, sumaron 13,425 personas en el primer trimestre de 2022, más del doble de lo registrado en el mismo periodo del año pasado, dijeron el martes autoridades del istmo.

La mayoría de los migrantes provienen de Venezuela, un país que atraviesa una persistente crisis económica y de derechos humanos que ha obligado a huir a más de seis millones de ciudadanos en los últimos años, mayormente a países de América, de acuerdo a cifras de la ONU.

El Servicio Nacional de Migración (SNM) de Panamá contabilizó en enero el ingreso de 4,442 migrantes por el Darién; en febrero, 4,014 y en marzo, 4,969. En los primeros tres meses de 2021 ingresaron 5,622 migrantes.

El Tapón del Darién, la región más intransitable y peligrosa de América Latina, marca el inicio de la ruta que siguen decenas de miles de migrantes procedentes de Sudamérica en su búsqueda por llegar a Estados Unidos. Una vez en Panamá, el Gobierno les proporciona paso seguro hasta Chiriquí, una zona fronteriza con Costa Rica, desde donde continúan su larga travesía.

Quienes cruzan el Tapón de Darién o llegan a través de rutas marítimas desde Sudamérica, están expuestos a la violencia, abuso sexual, trata de personas y enfermedades.

A principios del año, las autoridades panameñas reportaron una caída en el flujo de migrantes que arribaban al país a través del Darién, en parte, por el aumento de la seguridad para frenar el tráfico de personas, pero advirtieron que con la apertura total de las fronteras tras lo peor de la pandemia del coronavirus, el tránsito de extranjeros iría en ascenso.

Del total de migrantes en condición irregular que cruzaron el Darién en los tres primeros meses de 2022, el 31.4% -4,217- fueron venezolanos, una cifra que casi duplica a la registrada en todo el año pasado, agregó el SNM.

Los haitianos, que en años previos eran los que más utilizaban la ruta para llegar a Estado Unidos pasaron al segundo puesto con 1,589 migrantes, seguidos de los senegaleses y cubanos.

En 2020, Panamá registró un descenso de la cantidad de migrantes que llegó al país a través del Darién con unos 8,000, pero en 2021 la cifra se disparó a un histórico 133,000.