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La salud de Madonna, la irreverente ‘reina del pop’, atraviesa un duro momento debido la infección bacteriana que la mantuvo internada en cuidados intensivos y que la obligó a posponer el inicio de su gira mundial. Hoy su estado de salud preocupa a millones de fanáticos en todo el mundo, quienes siempre recuerdan los hitos que macaron la gran carrera musical de la cantante norteamericana.

Y es que Madonna es un ícono viviente de la música. Su particular estilo marcó una época y muchas veces levantó el grito al cielo de la sociedad conservador de aquel entonces, como lo hizo cuando se presentó en la primera edición de los MTV Music Awards en 1984. Allí cantó su tema ‘Like a virgin’ con un sensual vestido de novia, el cual lucía entre provocadores movimientos.

Esta canción es una que expresa los deseos emocionales de una mujer cuando se vuelve a enamorar. Su éxito fue enorme. De hecho, marcó el inicio del mito de la ‘reina del pop’.

Cuatro años después, causaría malestar en la Iglesia con su controvertido ‘Like a Prayer’, pues en el videoclip Madonna besa a un santo afrodescendiente y lo incita a que se amen dentro del templo. El video resalta, además, a la cantante estadounidense bailando frente a una cruz en llamas. MTV lo calificó como el videoclip más transgresor de la historia. 

Recordemos que los años noventa estuvieron marcados por cánones conservadores, que Madonna rompió en cada uno de sus videos. En ‘Jusify my love’, por ejemplo, se pueden ver escenas que mostraban desnudos, relaciones de personas del mismo sexo y sadomasoquismo. El éxito fue tan rotundo que las ventas del disco se dispararon por los cielos. 

Sin embargo, las puertas del cielo se le cerraron a la ‘diva de los escenarios’ cuando el papa Juan Pablo II la excomulgó al considerar una blasfemia sus performances. No obstante, esto avivó más su espíritu irreverente. Y en 2016 apareció sobre una cruz y con una corona de espinas en la cabeza.

HIZO LO QUE QUISO

Sin duda, Madonna hizo lo que quiso en el mundo musical, como besar con pasión a dos celebridades mundialmente famosas sobre un mismo escenario: a Britney Spears y Cristina Aguilera. Fue una escena polémica que quedó grabada en la historia de la música.

Las críticas nunca la frenaron ni siquiera en su deseo de ser madre, ya que adoptó a niños africanos. También se metió en temas políticos de su país, como cuando en 2017 le plantó cara al mismo Donald Trump, dando un duro discurso contra el entonces presidente de Estados Unidos.

Esta misma rebeldía y estilo único iba a ser superado en su nueva gira mundial. Pero la infección bacteriana la obligó a posponerla. Hoy, tras una dura semana para sus fanáticos, fuentes cercanas a la cantante han confirmado que ya se encuentra en casa recuperándose, con el objetivo de seguir brillando como la ‘reina del pop’.