Tras la revelación de Punto Final sobre la adjudicación de una millonaria obra para los Juegos Bolivarianos 2024 en Ayacucho, Latina Noticias intentó obtener respuestas de Esperanza Rojas, dueña del movimiento regional Wari Llaqta y aliada política de Wilfredo Oscorima, quien habría sido la beneficiaria de esta millonaria obra. ¿Qué respondió?
Esperanza Rojas, quien tiene estrechos lazos políticos con Oscorima, habría firmado un contrato en representación legal del Consorcio Bicentenario I. Este consorcio resultó acreedor de la buena pro para la construcción de un comedor destinado a más de dos mil deportistas que participarán en los Juegos Bolivarianos.
Con imágenes de nuestro corresponsal Cristhian Urbina, la empresaria fue cuestionada sobre la supuesta deuda coactiva, los juegos Bolivarianos 2024 y la paralización de obras en Ayacucho en el que estaría involucrada. Esperanza Rojas evitó responder directamente a todas las preguntas y señaló: «No me da la gana de responder, estas preguntando cosas que no son».
Además, ante las preguntas sobre el compromiso de culminar las obras en el tiempo determinado, Rojas también respondió: «Preocúpate de que los Ayacuchanos trabajen como usted, de que haya más comida […] una persona que hace bien, tu tienes que aplaudir».
La investigación realizada por Punto Final revela que el Consorcio Bicentenario I, representado por Esperanza Rojas, habría obtenido esta millonaria licitación tras ofertar cerca de 22 millones de soles para la construcción del comedor. Esta cifra representa un monto significativo en el presupuesto destinado a la infraestructura de los Juegos Bolivarianos en Ayacucho.
Según fuentes , la firma del contrato entre Legado, el órgano ejecutor de infraestructura pública para los juegos, y el Consorcio Bicentenario I habría generado controversia debido a los vínculos políticos entre Esperanza Rojas y Wilfredo Oscorima, gobernador regional de Ayacucho.
Además, es importante destacar la estrecha relación política entre Esperanza Rojas y Wilfredo Oscorima, quien fue electo como gobernador regional de Ayacucho gracias al respaldo del movimiento regional Wari Llaqta, liderado por Rojas. Esta alianza política habría influido en la adjudicación de la millonaria obra para los Juegos Bolivarianos.
Ante las acusaciones de posible favoritismo y conflicto de intereses, tanto Esperanza Rojas como Wilfredo Oscorima han negado cualquier irregularidad en el proceso de selección del contratista para la construcción del comedor. Ambos aseguran que la adjudicación se realizó de manera transparente y conforme a la normativa vigente.
Sin embargo, diversas voces críticas han cuestionado la transparencia del proceso y han solicitado una investigación exhaustiva para esclarecer los hechos.
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