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Se firmó en Trujillo la primera adenda que compromete a las autoridades, tanto nacionales como regionales, la culminación de la Tercera Etapa del Proyecto Especial Chavimochic (PECH), la misma que está trabada desde hace más de 6 años por irregularidades en el proceso constructor y la liberación de tierras.

A la sede de la Casa de la Identidad, en Trujillo, llegaron el primer ministro Alberto Otárola, la ministra de Agricultura Nelly Paredes, el gobernador de La Libertad César Acuña y algunos congresistas de la región para anunciar la promoción internacional de uno de los proyectos de irrigación más importante del país.

“Realmente, el Estado va a invertir mucha plata, en la primera y segunda etapa, más o menos, cerca de mil millones de dólares, y en la tercera etapa, 750 mil millones de dólares. Es una buena inversión”, afirmó César Acuña.

ASEGURA CULMINACIÓN DE OBRA

La culminación de las obras en Chavimochic permitirá mejorar el servicio de agua potable y la irrigación en tierras fértiles ocupadas por los campesinos. El presidente del Consejo de Ministros Alberto Otárola Peñaranda aseguró que el gobierno estará pendiente del proyecto, pese a que no se sabe cuándo se iniciarán los trabajos.

“Sus etapas I y II fueron ejecutadas mediante la modalidad de alianza público- privada, por eso nosotros estamos avanzando en la suscripción de esta adenda y sobre todo asegurando que este gran proyecto, que es de real interés para toda La Libertad, pueda hacerse realidad. Estoy seguro de que será antes de que culmine el año 2026″, indicó.

En obras de gran envergadura se detectan algunos indicios de corrupción que muchas veces terminan por paralizarse los proyectos. El premier aseguró que la ejecución de la tercera etapa contará con cláusulas de anticorrupción. “La firma de la adenda del proyecto Chavimochic refleja el compromiso de las autoridades y sociedad civil con esta obra emblemática que va a convertirse en una realidad. Estos son hechos y no palabras”, indicó.

IMPACTO ECONÓMICO

César Acuña expresó que a través de la ejecución de la III etapa, se incorporarán 63 000 nuevas hectáreas de tierras y se mejorarán las condiciones de riego de otras 48 000 hectáreas. Más de 32 mil familias de agricultores se beneficiarán del proyecto generando más de 150 mil nuevos puestos de trabajo.

Destacó el hecho de que una vez terminado el proyecto de irrigación beneficiará a tres provincias de la costa: Virú, Trujillo y Ascope, las que en total albergan el 80% de la población liberteña. Además, el objetivo del proyecto es suministrar agua potable a la población de Trujillo.