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Los comuneros de Nueva Fuerabamba, en Apurímac, continúan con el bloqueo del corredor minero del sur que conecta precisamente con el sitio minero de «Las Bambas». Ellos afirman que este fragmento de carretera, que atraviesa el fundo Yavi Yavi, es de su propiedad y que ha sido vulnerada al clasificarla como vía nacional. 

El conflicto social que cumple 51 días se agudiza, pues los comuneros exigen la inmediata liberación de su dirigente Gregorio Rojas, y de sus asesores, quienes se encuentran detenidos en Lima por el presunto delito de extorsión tras reunirse con el ministro de Energía y Minas, Francisco Ísmodes.

«Lo queremos libre. (Gregorio Rojas) No es un delincuente. No puede haber diálogo si el no está acá», manifestó Efraín Rojas, hermano del presidente de la comunidad de Nueva Fuerabamba. 

La comunidad indígena se niega a desbloquear la vía, y a entablar diálogo con las autoridades, sino liberan a sus dirigentes. Han advertido, además, que no permitirán el transporte de minerales a través de sus tierras (Fundo Yavi Yavi) de manera gratuita. 

Mientras tanto, efectivos de la Policía continúan en la zona de conflicto asegurando el orden de los propios ciudadanos. Hector Loayza, jefe de la séptima macroregión Cusco-Apurímac, desmintió la existencia de enfrentamientos: «se han estado lanzando psicosociales para exacerbar y se junten las otras comunidades. Así se genere una crisis». 

Por su parte, el ministro de Energía y Minas, Francisco Ísmodes, llegó hasta Abancay y se reunió con el gobernador regional de Apurímac. Él aseguró que confía en el diálogo entre comuneros, empresa privada y el gobierno. 

 

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